Casi 40 millones de personas han respirado aire contaminado por ozono durante el verano de 2019 en el Estado español, lo que equivale al 85% de la población y al 90 % del territorio. Es la primera y alarmante conclusión a la que ha llegado el informe estatal sobre contaminación por ozono en 2019 que ha hecho público Ecologistas en Acción.
Los repuntes del tráfico, la actividad industrial, la navegación marítima y aérea internacional o la ganadería intensiva son, según señala la organización ecologista, algunas de las principales causas de un problema que afecta de manera estructural a la salud y el medio ambiente, agravado por el cambio climático.
El tráfico, la industria, la navegación marítima y aérea o la ganadería son las principales causas del problema
Frente a esta situación, tal y como señalan desde Ecologistas en Acción, el Gobierno y las comunidades autónomas siguen sin adoptar medidas eficaces sobre el transporte, la industria y la ganadería que eviten los episodios puntuales y reduzcan los niveles de fondo.
Tal y como explica el informe, el ozono troposférico sigue siendo el contaminante atmosférico que año tras año afecta a más población y territorio en el Estado español. Durante 2019 sus niveles se han mantenido en general estables, con alzas y descensos según los territorios, relacionadas con las variaciones geográficas de las temperaturas y las precipitaciones en primavera y verano.
Seis de cada siete españoles han respirado un aire con más ozono del recomendado por la OMS
El informe de toma como referencia el valor recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de acuerdo al cual el aire contaminado por ozono ha afectado en 2019 a 39,8 millones de personas en el Estado español, el 85 % de su población, así como a 455.000 kilómetros cuadrados, el 90 % del territorio. Es decir, seis de cada siete españoles han respirado un aire con más ozono del recomendado por la OMS.
Si se considera el valor objetivo establecido por la normativa española y europea, más laxo que el de la OMS, la población que ha respirado aire contaminado por encima del estándar legal sería de 9,8 millones de personas, un 21 % del total, en torno a tres millones de afectados más que en 2013 y 2014, pero millón y medio menos que en 2015, 2017 y 2018. Es decir, uno de cada cinco españoles ha respirado un aire que incumple el estándar legal vigente de ozono.
Cataluña y Madrid, las más afectadas
Durante 2019, los territorios más afectados por el ozono troposférico han sido Cataluña y la Comunidad de Madrid, que han presentado la peor situación general del Estado. La contaminación por ozono ha sido también más alta que en años anteriores en Andalucía oriental, el norte del País Valenciano y el Valle del Ebro de Cataluña al País Vasco, y más baja en el tercio occidental de la Península, la cornisa cantábrica y la Región de Murcia.
Coincidiendo con las olas de calor estivales, en 2019 se han producido numerosas superaciones del umbral de información y una docena de superaciones del umbral de alerta, concentradas en Cataluña, donde este último umbral no se rebasaba desde el año 2003.
El ozono es un contaminante muy complejo, que no tiene una fuente humana directa sino que se forma en la superficie terrestre en presencia de radiación solar por la combinación de otros contaminantes denominados precursores, emitidos por el transporte (en especial los vehículos diésel), las centrales termoeléctricas, ciertas actividades industriales o la ganadería intensiva. Se trata por tanto de un contaminante secundario que durante el verano afecta sobre todo a las áreas suburbanas y rurales influenciadas por la contaminación urbana e industrial.