El Reino Unido quiere tomarse en serio el ciclismo en el escenario post-Covid19. El Gobierno proporcionará 2.000 millones de libras (algo más de 2.200 millones de euros) para crear carriles bici, pavimentos más anchos, cruces más seguros y corredores para bicicletas y autobuses. La partida presupuestaria forma parte de los nuevos fondos para apoyar el transporte seguro durante la pandemia de coronavirus.
Las ayudas irán más allá de la mejora y la creación de nuevas infraestructuras. Parte del dinero irá destinado a emitir vales para ayudar a las personas on menos recursos a pagar las reparaciones de bicicletas. Asimismo, se están desarrollando planes para hacer que haya más instalaciones de reparación de bicicletas en la vía pública.
El objetivo del plan es descongestionar el transporte público, afectado por las medidas de distanciamiento social
Las autoridades británicas confían en que todas estas medidas contribuyan a aumentar significativamente el número de personas que se desplazan a pie o en bicicleta, contribuyendo así a descongestionar las redes de carreteras, autobuses y ferrocarriles, dado que el uso del transporte público se va a restringir por las medidas de distanciamiento social.
Del mismo modo, el Gobierno también ha publicado una guía legal, que se ha hecho efectiva de inmediato, que indicará a los ayuntamientos cómo proceder para reasignar el espacio vial para un número significativamente mayor de ciclistas y peatones.