Los test de bicicletas que hacemos en Ciclosfera suelen ser con bicis nuevas, recién sacadas de la caja, impolutas. Pero esta vez haremos algo distinto. Hemos probado una bicicleta de carga Bullitt con 5.000 kilómetros y le hemos hecho de todo. La bici de la prueba ha sido el modelo Milk Plus con bastante uso y, ojo, convencional, sin asistencia eléctrica. Nos la han prestado para el test nuestros amigos de Okocicle en Madrid y le hemos metido algún que otro kilómetro de más. Si no estás cerca de Madrid en este mapa puedes ver dónde tienes tu distribuidor más cercano.
¿Quieres verla en acción doméstica?
¿Esta marca es nueva?
La primera Bullitt es de 2008, es decir, 14 años para una empresa fabricando el mismo tipo de bicicletas es experiencia suficiente como para saber que el producto está acabado de la mejor y más fiable manera posible.
Todas las Bullitt (más abajo te diremos todos los distintos tipos de Bullitt que existen) están fabricadas por la marca Larry vs. Harry, una compañía que tiene por costumbre no hacer publicidad alguna porque el boca a boca hace toda la labor de propaganda. De hecho, no tienen ni un euro dedicado al departamento de marketing. Se trata de Lars Malmborg y Hans Fogh, dos daneses que han reunido a un equipo de profesionales apasionados de la bicicleta y el diseño dando como resultado una de las bicis de carga más robustas del mercado a día de hoy. Uno de ellos, no sabemos cuál, ya no vive en Copenhague, sino en Taiwán, para supervisar personalmente la fabricación de cada Bullitt.
El día a día normal
La intención de este artículo es demostrar que una bici de carga puede ser perfectamente tu bici habitual, de diario, ya que no es tan grande y pesada como pueda parecer a simple vista. Para empezar, mide 46 centímetros de ancho, lo mismo (o en la media) que una bicicleta de montaña normal, así que si te preocupaba cómo entrar por alguna puerta de casa, ya no es una excusa. En cuanto a sus casi dos metros y medio de largo, quizá el único (y pequeño) inconveniente, va a obligarte a usar la marcha atrás en más ocasiones que con tu bici de siempre, pero te acostumbrarás enseguida. Al principio hasta te hace gracia y pasados un par de días, lo dominas como si llevases la vida entera montado en una cargobike.
Huelga decir que la hemos usado para todo tipo de trayectos, no sólo aquellos en los que necesitábamos cargar con algo. Aun así, nos ha resultado tremendamente útil para un viajecito al vivero para poner un poco de verde en la casa para esta primavera, nos hemos acercado hasta el contenedor de papel y vidrio, al de la ropa que ya no usamos, y por supuesto también para hacer la compra de la semana.
Viajes al vivero, al contenedor o, claro, al supermercado... ¡Todo lo puedes hacer con una bici de carga!
La idea de hacer una prueba a una bici de este tipo con ya 5.000 kilómetros era, precisamente, poder saber cómo envejece una cargobike. Saber a ciencia cierta qué resultado nos va a dar pasados unos años, cuando le hayamos "metido caña". Y lo cierto es que nuestra Milk Plus no hace ruido alguno, el caballete sigue teniendo el muelle como el primer día, dirección, cambio y frenos permanecen en perfecto estado de revista... En resumen: que me he encontrado con una máquina en plenas facultades para seguir llevando carga (o no).
¿Se maneja igual que cualquier otra bici?
Vale. Es una bici más grande de lo normal pero lo primero que nos llama la atención es la comodidad. Sentados estamos en la gloria. Una potencia extensible Ergotec "Easy- Up" para poner el manillar a nuestro antojo en cada momento nos ha permitido pasar de una conducción más deportiva a una más tranquila dependiendo de cada situación. El centro de gravedad de la bicicleta es tan bajo que dejarte caer por alguna cuesta, unido a la fiabilidad que nos dan las ruedas (unas Continental y otra Tannus, aunque Larry vs. Harry siempre monta Marathon) y los frenos hidráulicos (vienen montadas con Tektro o TRP) nos atrevemos a tumbar en cada curva porque parece que vamos sobre raíles. Atención en este punto si llevamos naranjas sueltas en el cajón de carga.
Los primeros minutos de conducción pueden resultar extraños, efectivamente. Hay que usar mucho más los giros de manillar que una bicicleta convencional. (Nota mental: cuando vuelvas a montar en tu bici de siempre, te va a parecer un monociclo). Esas primeras pedaladas, en las que pensamos que perderemos el equilibrio, nos hacen pensar que ese vehículo no es para nosotros, pero una vez se pone la Bullitt en marcha, la cosa cambia. La sensación de seguridad y estabilidad es infinitamente mayor que en cualquier otra bici. Lógico, pesa y mide mucho más.
Monta toda la carga sobre el bastidor haciendo que pueda transportar hasta 180kg de peso.
Una de las ventajas de las que Bullitt (o Larry vs. Harry) presume es de montar la caja de carga directamente en el bastidor, algo que hace que la conducción sea mucho más ligera que con otras bicis de carga y que pesando 22 kg, puede transportar hasta 180kg según sus propias palabras. Puede que tus piernas no aguanten tanto peso, pero la Bullitt sí. De cualquier modo, desde 2015, tienes un e-Bullitt para echarte un cable en los momentos más difíciles... o en todos ya puestos.
Que la bici es estupenda no es algo que digan sólo sus fabricantes. Bullitt ha recibido el premio Red Dot Design en 2015 pero son gente inquieta. De hecho ya tienen en marcha una nueva bici de carga, la Bullitt X: si nos ponemos técnicos, podríamos decir que han aumentado de 300 a 400 litros la capacidad de carga de la bici, pero para que nos entendamos todos: es igual, pero más larga y capaz. Ganas se nos quedan de probarla, pero "arrieritos somos".
Algunos datos de interés
PRECIO: 3.200€ convencional y 5.000€ eléctrica
PESO: 22.5 KG.
CAPACIDAD DE CARGA: 180kg (contando contigo)
CUADRO: Aluminio 7005 / T6
Tamaño de la ruedas: 20" delantera / 26" trasera
Medidas 46cm de ancho / 243cm de largo
Pero, ¿Cuántas Bullitt hay?
El cuadro de las Bullitt es siempre el mismo, sólo cambian los componentes con los que la queramos "vestir". Por supuesto, puedes comprarte el cuadro por separado y ponerle después los componentes que más se ajusten a tus necesidades, pero desde la marca ofrecen algunas configuraciones ya preparadas para que no tengas que comerte mucho el tarro y vaya todo como la seda.
Los nombres que recibe cada modelo tienen guiños cinematográficos o musicales
Para diferenciarlas entre sí lo que cambia es el color del cuadro y el nombre a la bici. Con ciertos guiños musicales y cinematográficos, un pelín pop, la naranja es ClockWork, Bluebird es la azul, Moondog es un azul muy oscuro, Milk Plus blanca, como la de la prueba, la granate Major Tom, Bollocks es el nombre de la amarilla, "Race" es el nombre que recibe la verde oscuro, Lizard King es verde clarito, y RA", sin pintar. Hay también una edición especial de color rosa chicle es Miss Bullitt.
Por concluir
Quítate de la cabeza cualquier prejuicio sobre peso y manejabilidad que tengas respecto a las bicicletas de carga: SON BICICLETAS NORMALES, solo que sirven para muchas más cosas. Nos ponemos muy serios para decirte que les des una oportunidad como tu bici de diario si no puedes tener dos bicis en casa y que, si puedes sumar una bici más a tu colección, deberías tener las bicis de carga en tu punto de mira, porque te cambian la vida... otra vez.
