Cultura ciclista

Ir en bici "nos renta": así fomentan económicamente el ciclismo en los Países Bajos

Philips, Booking.com, Payout, la Policía Nacional o distintos ministerios son sólo algunas de las organizaciones que fomentan el uso de la bici entre sus empleados en los Países Bajos. No, no es una cuestión de “cultura ciclista”: es que es económicamente rentable.

Sabido es: ir a trabajar en bici mejora tu salud. Mantiene la glucosa y el colesterol a raya. Además, desciende el estrés, mejora el estado de ánimo y te llena de energía. Ingredientes para una buena receta: ¡mejorar la productividad en el trabajo!

Y no es algo que diga sólo una fanática de la bici: el Ministerio de Infraestructura holandés lo ha analizado en profundidad, y según sus datos el 80% de los trabajadores que se desplazan pedaleando muestran un mayor compromiso con su trabajo y empresa. Su absentismo laboral se reduce en un día y medio y mejora su puntualidad.

Pero hay más: cada empleado que va en bici a trabajar en vez de en coche ahorra las mismas emisiones que absorbería un árbol cada mes. El riesgo de diabetes disminuye un 20% entre los que usan con frecuencia la bici. Van menos al médico. En definitiva, que si el gobierno nacional apoya tanto el ciclismo es, también y directamente, porque le supone rentable.

Muchas grandes empresas en Países Bajos hacen grandes esfuerzos para que sus empleados continúen yendo en bici al trabajo.
Muchas grandes empresas en Países Bajos hacen grandes esfuerzos para que sus empleados continúen yendo en bici al trabajo.

Beneficios varios

En su estrategia de apoyo a la movilidad sostenible, se han desarrollado diferentes planes gubernamentales que benefician a empresas y a empleados. El llamado Fietsplan, por ejemplo, permite comprar bicis con beneficios fiscales a través de las empresas, y estas obtienen deducciones de impuestos por promover el ciclismo entre su plantilla.

Como trabajador, puedes elegir comprar una bici (convencional, eléctrica o de carga) a través de tu empresa pagándola a plazos, sin intereses, o hacer un contrato de leasing que incluya el mantenimiento y el seguro por una cómoda cuota mensual. El plan antes no permitía el uso recreativo de la bicicleta, pero ahora no hay límites y puedes recurrir a él también para tus planes de ocio.

¿Cuál sería el beneficio fiscal para un empleado que adquiere una bicicleta, por ejemplo, de 2.000 euros? El dinero se descuenta de su salario bruto, dejando de pagar impuestos por dicho importe. Es decir: si el empleado paga, por ejemplo, un 40% de impuestos, el ahorro fiscal es de 800 euros y el coste real de la bicicleta de 1.200 euros.

La empresa se reduce los pagos de seguridad social porque la base imponible también disminuye ese importe. Eso no es todo: si el empleado no se adhiere al Fietsplan pero usa su bici para ir a trabajar, Hacienda le paga 0,23 céntimos de euro por cada kilómetro recorrido al mes. Algo que aplica en la misma medida para trabajadores autónomos o por cuenta ajena.

Tan frescos

La Policía Nacional holandesa, el mayor empleador del país con más de 63.000 trabajadores, cuenta con una iniciativa llamada ¡Ve fresco en bicicleta! con la que promueve la sostenibilidad y el bienestar de su personal mediante el uso de la bici. Desde 2022 se han duplicado las solicitudes de bicis al aumentar el presupuesto para adquirirlas, y se han sumado estrategias como mejorar la infraestructura ciclista en 800 comisarías u organizar actividades de sensibilización impartidas por el ex ciclista profesional Henk Lubberding.

Actualmente, más del 25% de sus empleados van en bici al trabajo, y el objetivo es alcanzar el 37% en 2030. Cada unidad de la Policía cuenta con embajadores ciclistas que organizan eventos, días de mantenimiento gratuito y promueven la cultura ciclista, y hasta contrataron a una agencia de comunicación para desafiar a los que van en coche con mensajes graciosos para que escojan la bicicleta.

El 25% de los empleados de la Policía Nacional holandesa va en bici al trabajo.
El 25% de los empleados de la Policía Nacional holandesa va en bici al trabajo.

Cientos de grandes empresas han desarrollado sus propios planes. ASML, la gran productora de semiconductores, ofrece en su sede bicis compartidas. Su director de Acceso y Movilidad, Pim de Weerd, cuenta que su objetivo es “que más empleados viajen en transporte público y bici, para lo que ofrecemos e-bikes que les permiten ir y venir desde la Estación Central de Eindhoven”.

ASML, con beneficios anuales de más de dos mil millones de euros, “regala” hasta mil máquinas para recorrer esos siete kilómetros, además de los trayectos entre los distintos edificios del campus. Otro buen ejemplo es el de Philips. Por iniciativa de su departamento de Recursos Humanos creó una “Parada de Boxes” para las bicicletas de sus empleados, donde las controlan y mantienen de manera gratuita sobre todo de cara al invierno. Además, Philips les ofrece la opción de probar una bicicleta eléctrica durante una semana, incluyendo asistencia en carretera y un teléfono de atención por si tienen dudas.

La empresa digital Booking.com, con sede en Ámsterdam, construyó sus oficinas centrales en pleno corazón de la ciudad: por supuesto, alberga un parking subterráneo para 200 coches y ¡más de 2.000 bicicletas! El fundador de Payaut, Ernst van Niekerk, ofrece una bici de empresa para sus empleados, que eligieron contar con una suscripción a Swapfiets (unas populares bicicletas por suscripción conocidas por su rueda delantera azul) como pago en especie. En palabras de Ernst, “la medida no sólo ayuda y anima a llevar un estilo de vida saludable, sino que también les incita a recorrer pedaleando Ámsterdam, una experiencia maravillosa”.

'Esto SÍ es Ámsterdam' está en Ciclosfera #50.
'Esto SÍ es Ámsterdam' está en Ciclosfera #50.

Una de cal y otra de coche

Hemos dado muchos buenos ejemplos, pero no es oro todo lo que reluce: también existen beneficios para las personas que van en coche a trabajar. El pago fiscal por kilometraje en coche, los planes de leasing a través de la empresa y ofrecer parking a los empleados son también medidas habituales.

Por eso las entradas de las grandes ciudades holandesas, a pesar de los millones de personas que ya se desplazan en tren y bici, siguen padeciendo atascos prácticamente a diario.