Los mismos kilómetros y la misma dureza, pero sin las comodidades que conlleva todo el aparato de una carrera como el Tour de Francia. Un grupo de 13 mujeres han realizado el recorrido de la ronda gala para reclamar una edición femenina de la prueba ciclista más popular del planeta.
El proyecto nace del Club Omnisport de Courcouronnes Cyclisme Fémenin (COCCF), que tiene como objetivo principal promover el ciclismo femenino y conseguir una cobertura mediática digna. Este 2018 es el cuarto año consecutivo que realizan la proeza, en la que han participado once ciclistas francesas, una ucraniana y la española Anna Barrero.
“El Tour de Francia, a diferencia del Giro, no tiene una prueba femenina”, ha denunciado la catalana en una entrevista en el diario Marca. “Con este reto lo que queremos hacer ver al mundo es que las mujeres también podemos hacer el mismo recorrido que están haciendo los hombres y completar este espectáculo”.
“Queremos hacer ver al mundo es que las mujeres también podemos hacer el mismo recorrido”
“El reto es completar el mismo recorrido en el mejor tiempo posible, pero lógicamente somos todas del mismo equipo (patrocinado por Skoda UK) y lo único que hacemos es apoyarnos para llegar de la mejor manera posible”, explica Barrero, quien no duda en apuntar la que para ella es la etapa más dura de esta edición. “La del pasado jueves, con final en Alpe dHuez es de las más duras. Es de casi 200 kilómetros con 5.000 metros de desnivel y tres puertos fuera de categoría”, añade antes de señalar que no han tenido contacto con los hombres. “Nadie nos ha llamado, pero quizá sí sería interesante que algún profesional diera visibilidad a este proyecto, es bueno para todos”.
Para Barrero, la experiencia está resultando muy enriquecedora. “En el equipo estamos concienciadas de que esto puede servir al deporte femenino. El entrenamiento ha sido duro durante los meses previos, pero hasta la fecha estamos completando las etapas con normalidad. Nos gustaría ser más corredoras, pero entendemos que para poder hacer una gran competición es necesario el apoyo de una gran organización”, advierte la española, quien asegura que el Tour de Francia no ha querido saber nada de su proyecto.
Que exista un Tour de Francia femenino debe ser una labor de todos, no sólo de las mujeres
“El ciclismo es un deporte duro, pero estamos viendo cómo poco a poco las mujeres vamos creciendo en esta disciplina. El Tour es la carrera más importante de todas, uno de los eventos de mayor trascendencia no sólo a nivel ciclista, sino global. Y las mujeres tenemos que estar aquí. Por si alguien lo dudaba, nosotras estamos aquí para demostrar que es viable”, añade alguien que se congratula del apoyo que reciben cada día: “Lógicamente no hay tanto público en las carreteras, pero sí hay cientos de ciclistas que nos acompañan entre nuestra aventura, además son hombres y mujeres. Que exista un Tour de Francia femenino debe ser una labor de todos, no sólo de las mujeres”.