Habra ayudas para los coches eléctricos. Habrá ayudas para las motos eléctricas. Se fomentará la implantación de puntos de recarga para vehículos eléctricos en zonas de acceso público. Y, sin embargo, no habrá ningún tipo de subvención para las bicicletas eléctricas. Así es el nuevo Plan MOVEA 2017, confirmado por el Consejo de Ministros de España y que, en teoría, pretende estimular la compra de “vehículos eficientes”.
Como informa AMBE (Asociación de Marcas y Bicicletas de España), desde octubre de 2013 (cuando fue aprobado el Plan PIMA Aire 2 por el Ministerio de Medio Ambiente) la bicicleta eléctrica venía siendo incluida en los sucesivos Planes del Gobierno (Pima 3, Lima 4 y Movea 2015 y 2016) como vehículo objeto de subvención con 200€ por bicicleta eléctrica.
Sin embargo, el plan MOVEA 2017 del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad ha decidido no seguir incluyéndolas. ¿El motivo? Según fuentes del propio Ministerio, “lo farragoso” que resulta “gestionar subvenciones tan pequeñas con miles de puntos de venta de bicicletas”.
Según parece, al Ministerio le parece “farragoso” gestionar subvenciones tan pequeñas y con tantos puntos de venta
Como la propia AMBE explica, la decisión implica dejar de lado a un sector que, sólo en 2016, generó un total de 2.000 nuevos puestos de trabajo (10,64% de crecimiento del empleo), facturó 70 millones de euros en venta de bicicletas eléctricas y alcanzando las 40.268 unidades vendidas. En cambio, el Gobierno decide apoyar a sectores con mucho menor volumen de venta como el de las motocicletas eléctricas (793 vendidas en 2016) o los ciclomotores eléctricos (629 unidades). La indignación es todavía mayor al saberse que el nuevo Plan MOVEA destina entre 1.000 y 2.000€ para cada motocicleta eléctrica subvencionada.
“Con esta decisión”, dicen desde AMBE, “el Ministerio demuestra no sólo una notable falta de interés ante un vehículo, la bicicleta eléctrica, que está llamado a producir una transformación profunda de la movilidad en nuestras ciudades, tal y como está ocurriendo en los Países Bajos (16 bicicletas eléctricas vendidas al año por cada 100.000 habitantes) o en Alemania (6 bicicletas eléctricas vendidas al año por cada 100.000 habitantes), sino que además se desentiende por completo de cualquier objetivo de fomentar los hábitos saludables y los medios de transporte activos que también ayudarían a reducir la tasa de mortalidad por enfermedades entre ellas las relacionadas con la obesidad (más de 3 millones de personas fallecen al año en el mundo por enfermedades relacionadas con la obesidad según la ONU)”.
El Ministerio demuestra su falta de interés ante un vehículo llamado a transformar la movilidad urbana
Las marcas españolas de bicicletas habían solicitado que, al menos, se siguiera subvencionando con 200€ cada bicicleta vendida (el precio medio de una bicicleta de pedaleo asistido es de 1.740€). Sin embargo, y según AMBE, el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, se ha debido “guiar por la dificultad que le supuso gestionar las 1.000 bicicletas eléctricas subvencionadas por el MOVEA 2016”. Basta recordar que este tipo de ayudas han sido consideradas por el propio sector como “la mayor cagada de la historia de las subvenciones” (Alejo Bastos, dueño de Biobike).
Aunque el caso de las bicicletas sea el más llamativo, en general el apoyo del Gobierno a los vehículos eléctricos es ridículo. El plan MOVEA 2017 cuenta con un presupuesto de 16,6 millones de euros a repartir entre los distintos sectores. 12 de ellos serán para los coches eléctricos: Francia, sin ir más lejos, dedicará este año 347 millones de euros a ayudar la compra de este mismo tipo de vehículos.