Es una realidad innegable: las bicicletas de carga están llamadas a jugar un papel clave en las ciudades del futuro. La llamada ciclologística ha venido para quedarse, y con ella vamos a ganar todos.
Los todopoderosos fabricantes de automóviles son especialistas en detectar nichos de mercado: toca adaptarse, y eso pasa por los pedales. Quizá por ello cada vez son más las marcas que presentan bicicletas eléctricas para la movilidad urbana, pero también cargo bikes para el transporte de mercancías.
Es el caso de la nueva Volkswagen Cargo e-bike. Un triciclo eléctrico diseñado para usarse tanto en ciudad como en plantas de producción, hoteles y entornos en los que se requiera algún vehículo para el transporte de cargas de hasta 0,5 metros cúbicos, lo que permite subir la plataforma que tiene en la parte frontal, tal y como informa la web Xataca.
La cargo e-bike de Volkswagen pesa unos 40 kilos, mide algo más de dos metros de largo y alcanza, como todas las eléctricas, una velocidad de 25 kilómetros por hora. Su batería proporciona una autonomía de hasta 100 kilómetros, según Volkswagen.
“La e-bike de carga es la solución de Volkswagen para los desafíos de movilidad del mañana”, ha asegurado Thomas Sedran, presidente de la Junta de Vehículos Comerciales de la compañía, en unas declaraciones recogidas por bike-eu. “La movilidad sostenible y la mejora de la calidad del aire en nuestras ciudades son dos objetivos prioritarios para Volkswagen”, añadió Sedran.
Por el momento aún no se conoce la fecha de lanzamiento, aunque desde la marca alemana han apuntado que su nueva bicicleta de carga verá la luz a lo largo de 2019. El precio también sigue siendo un misterio.