Nos pasa cada vez que nos movemos por una autopista: ¿cómo es posible dedicar tantos carriles, tantos metros, a los vehículos motorizados y no encontrar un espacio adecuado y seguro para las bicicletas?
Parece que en Berlín, la capital alemana, piensan lo mismo. Por eso ha surgido la posibilidad de reformar la autopista A 103, una carretera de circunvalación en el lado oeste de la ciudad, para que pueda ser empleado por las bicicletas. Algo más: con la creación de un carril bici de doble sentido en la mediana de la carretera los ciclistas podrían cruzar Zehlendorf (un pueblo a las afueras de Berlín) y llegar hasta Potsdam, una preciosa ciudad a menos de 40 kilómetros.
La propuesta (de momento sólo es eso, una propuesta) consistiría en eliminar uno de los tres carriles para coches, dejándolo en dos por cada sentido y dedicando los dos segregados a las bicicletas. En este caso, tampoco los automovilistas se podrían quejar: hablamos de una carretera no demasiado transitada y en la que no se registra un tráfico descomunal.
Los carriles tendrían una anchura aproximada de 3,75 metros, y se estudiaría la posibilidad de reducir la velocidad máxima de los automóviles a 60 kilómetros por hora (ahora mismo el límite es de 80km/h) para que disminuya el riesgo de una pérdida de control.
Los defensores de este proyecto aseguran que los coches apenas se verían afectados, y sobre todo argumentan que el coste económico de aprovechar el exceso de carriles para el tráfico motorizado es mínimo comparado a la creación de un carril bici paralelo.
Para aquellos que sepan alemán, toda la información está en una web que detalla cada una de las actuaciones a realizar, además de describir la situación actual.
- ‘Autopistas ciclistas: ¿el futuro o un disparate?’. Un magnífico reportaje sobre un proyecto en Londres.
- ‘Maravillas ciclistas: la autopista ciclista con paneles solares de Corea del Sur’. Recuerda una de nuestras maravillas ciclistas, esta vez con visos de hacerse realidad.