Los médicos fueron claros: debía mantener el azúcar a raya, porque si se disparaba podría ser catastrófico. "La bicicleta eléctrica me cambió la vida", asegura Francisco. "Los médicos me dijeron que hacer deporte era clave para mantener los niveles óptimos de azúcar, así que probé a caminar y nadar hasta que me compré una bici, y me di cuenta de que después de dos horas pedaleando mi azúcar bajaba considerablemente. ¡Por fin había encontrado el deporte perfecto!
¿Sabéis una cosa de la bici? Sí: que engancha. Las rutas eran cada vez más largas. Los retos más atrevidos. Así que, por fin, optó por una eléctrica. "La compré en 2020", explica, "una Cube Stereo Hybrid 140 Race con motor Bosch Performance Line CX y batería Bosch de 625Wh. ¡Y ya he superado los 50.000 kilómetros con ella!"
¿50.000 kilómetros con ella? Sí: 50.000 kilómetros. Francisco podría haber dado la vuelta al mundo, y todavía le sobrarían kilómetros para llegar, por ejemplo, de Madrid a Buenos Aires. Y serían un placer porque, como explica, "no sólo ruedo por prescripción médica sino porque disfruto mucho con ella. Llego a sitios donde antes no podía llegar, hago rutas de ensueño, comparto momentos de felicidad absoluta con los amigos…
Por supuesto, a alguien con 50.000km en el display de su bici hay que preguntarle por consejos de mantenimiento de una bicicleta eléctrica. Y, sorprendentemente, no hay demasiados: "La bici duerme siempre bien resguardada, candada y en el trastero", explica. "Ahí la dejo cargando cada tarde, preparada para el día siguiente". "Salgo con ella cinco días a la semana, y en cada salida rondo los cien kilómetros. ¡Así que esa batería tiene que cargarse y descansar bien para que a la mañana siguiente siga regalándome buenos momentos!"
