A más ciclistas, más dinero para todos. Es la principal conclusión de un estudio llevado a cabo por la Universidad de California, y del que se ha hecho eco la web road.cc, que incide en los beneficios socioeconómicos de invertir en la bicicleta frente al automóvil privado. Pero no sólo en ella: el peatón y el transporte público juegan, según el estudio, un papel fundamental en el desarrollo económico de una ciudad y en la riqueza de sus habitantes.
“La competitividad de una población depende en gran medida de lo activa que sea su población”
En concreto, el estudio apunta que de cada libra (1,38 euros) invertida en este tipo de infraestructuras tienen un retorno para la sociedad de 13 libras (17,95 euros). El beneficio se cuantifica sobre todo en el incremento de la productividad de los trabajadores que viven en estas ciudades y en el aumento de ventas de los comercios locales, pero también en la mejora de la salud de los ciudadanos, producto de la menor contaminación ambiental.
“La competitividad de una población depende en gran medida de lo activa que sea su población”, ha declarado Chad Spoon, uno de los responsables del estudio. En ese sentido, éste señala asimismo la necesidad de que las autoridades inviertan en más parques públicos y espacios abiertos, e incide en la importancia de que los niños vivan cerca de sus colegios de cara a reducir los desplazamientos y fomentar que caminen.