Hacer ejercicio de manera habitual no sólo te ayudará a encontrarte mejor: también alargará tu vida. En concreto, doblará las posibilidades de que llegues a los 85 años.
Esa es la principal conclusión de un ambicioso estudio publicado en* Journal of the American College of Cardiology*. Para llegar a ella se basaron en una cuantiosa muestra formada por 6.500 pacientes de una edad promedio de 75 años.
Todos los usjetos que se prestaron voluntarios a formar parte del estudio realizaron una prueba de esfuerzo en la cinta de correr, en la que tuvieron que permanecer durante el máximo tiempo del que fueran capaces. En base a dicho aguante, fueron clasificados en distintos grupos.
Durante los diez años siguientes a la prueba, los investigadores siguieron la evolución de los participantes del estudio hasta que todos ellos alcanzaron aproximadamente los 85 años de edad. Un periodo de tiempo en el que fallecieron el 39% de ellos.
La condición física está estrechamente ligada al riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares
La clave de la investigación estaba precisamente en ese porcentaje y en su condición física diez años antes: aquellos individuos del grupo más apto y con mejor forma física tenían más del doble de probabilidades de estar vivos 10 años más tarde que los individuos en el grupo menos apto.
Según recuerdan los autores del estudio, la condición física está estrechamente ligada al riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, algo que obviamente puede afectar su riesgo de muerte prematura. Asimismo, los niveles más altos de condición física también pueden reducir los riesgos de apoplejía, presión arterial alta, enfermedades cardíacas y obesidad, al tiempo que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y reducir la inflamación.