Por cuarto año consecutivo, las asociaciones de vecinos de la Comunidad de Madrid convocan para este domingo una manifestación para exigir equipamientos educativos públicos suficientes y de calidad. Y lo hacen de la mejor manera posible: en bicicleta.
A partir de las 10:30, cuatro columnas ciclistas rodarán por la ciudad procedentes de sus cuatro puntos cardinales para confluir a las 13:00 en la Puerta del Sol, ante la sede del Gobierno autonómico.
Allí, los participantes denunciarán el deterioro de la enseñanza pública con el fin de que sus razones lleguen a oídos del nuevo presidente de la región, Ángel Garrido. La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), que a través de su Comisión de Educación organiza la protesta, espera que Garrido “se muestre más sensible que su predecesora a las demandas más urgentes de la comunidad educativa”. Demandas que, en opinión de los convocantes, “suenan ya clásicas, como la construcción de nuevos colegios e institutos públicos en los ensanches de nuestras ciudades, el freno de la masificación, la finalización de una vez por todas de los centros que se están construyendo por fases, la ampliación del número de plazas e institutos de FP o la mejora de las instalaciones y del mantenimiento cotidiano de muchos centros veteranos”.
La Comunidad de Madrid ostenta el dudoso honor de ser la que menos gasta por alumno
Y es que, según los datos que aportan los propios organizadores de la manifestación, este curso 1.195.810 alumnos y alumnas iniciaron sus clases en las enseñanzas del régimen general en la Comunidad de Madrid. O lo que es lo mismo 16.625 alumnos más que el curso anterior. Frente a ello, el Gobierno regional sólo ha incrementado un 3,2% su presupuesto en Educación respecto a 2017, una subida ligeramente superior a la inflación pero inferior al crecimiento del PIB de 2107 (3,4%).
“A pesar de que la Comunidad de Madrid es una de las regiones más ricas del Estado, ostenta el dudoso honor de ser la que menos gasta por alumno y la que dedica un porcentaje menor de su PIB a educación (un 2,1% frente al 5% del PIB que destina Euskadi)”, denuncian las asociaciones vecinales. “A esto hay que sumar la apuesta decidida del Gobierno regional por beneficiar a la enseñanza privada en los últimos años, lo que se ha traducido en que el 45% del alumnado de la región estudia hoy en día en centros privados, la mayoría subvencionados a través de conciertos con la Consejería de Educación. Durante 2018, el Gobierno regional destinará más de 1.000 millones de euros del presupuesto anual de la Comunidad a sufragar a la escuela privada concertada”.