Si la bicicleta es buena para el medio ambiente y el aire que respiramos, ¿por qué no utilizarla también como motor para plantar más árboles? Al fin y al cabo, ellos son los pulmones de nuestras ciudades.
Bajo ese planteamiento, la ciudad brasileña de São Paulo acoge una hermosa iniciativa que tiene como objetivo plantar centenares de árboles… o quizá miles. Porque el número de ellos dependerá de los kilómetros que recorran en bicicleta los participantes de la iniciativa.
El funcionamiento es sencillo: todos aquellos que quieran participar han de descargarse la aplicación en su smartphone y hacerse una foto o vídeo al final del recorrido, que se mostrará en su página de Facebook, donde puede retar a sus amigos a sumarse a la campaña. Los kilómetros totales recorridos por los participantes se traducirán en árboles plantados.
La campaña, que ha sido puesta en marcha por la marca de spray nasal Sorine, de la empresa farmacéutica Aché, pretende llamar la atención sobre el grave problema de contaminación que, como São Paulo, viven las grandes ciudades del mundo. De hecho, y según datos de la Organización Mundial de la Salud, durante el pasado 2012 fallecieron en el mundo 3,7 millones de personas por problemas de salud derivados directamente de la contaminación atmosférica.