“El Red Hook Criterium es más un festival que una carrera de bicis”. Eso nos explicaba hace unas semanas David Trimble, el creador del Red Hook Criterium, y es cierto: además de velocidad, emoción y, por qué no decirlo, riesgo, gran parte de la escena internacional del piñón fijo se reúne para celebrar su amor por la bicicleta.
Y este fin de semana está marcado, en rojo, en el calendario, porque el Red Hook Criterium llega a Barcelona. La carrera será el sábado, 2 de septiembre, en el Parc del Forum, con pruebas clasificatorias desde las 12 del mediodía y finales a partir de las ocho de la tarde.
Pero, claro, hay mucho más. El viernes, por ejemplo, se celebra entre 10 y 14 horas el Track Day, donde los participantes pueden “calentar motores” en un escenario mágico: el Velódromo d’Horta, al norte de Barcelona, donde se celebraron las pruebas ciclistas en pista de los Juegos Olímpicos de Barcelona’92.
Después toca un poco de fiesta: será en el propio Parc del Forum, escenario un día después del RHC, y no faltará de nada: buratos, cerveza, comida vegans… Una oportunidad magnífica para que, horas antes de competir, los corredores y todos aquellos apasionados del piñón fijo compartan un rato de diversión y compañerismo.
Y, después de la fiesta, una buena dosis de adrenalina: My Beatiful Parking organiza una Alleycat a la que puede sumarse todo el mundo… con ganas de recorrer, a toda velocidad, la ciudad.
Y, por fin, el sábado llega la carrera. Como hemos contado, durante casi todo el sábado se celebra la competición en el Parc del Forum. Las finales empezarán a partir de las ocho de la tarde, por lo que a medianoche sabremos quiénes se han impuesto en esta “etapa” del Red Hook Criterium, a la espera de la prueba final (que se celebrará el Milán el 8 de octubre) que decidirá quién ha ganado este año.
Eso sí: gane quien gane, habrá motivos para celebrar muchas cosas. Por eso, después de la carrera del sábado, el célebre Café Del Mar de Barcelona será el escenario de una ‘After Party’: DJ en vivo, terraza al aire libre, comida, bebidas “especiales”… Por supuesto, las bicicletas son bienvenidas: habrá aparcamiento para ellas aunque, eso sí, es recomendable llevar el candado para evitar “tentaciones”.
