Así fue: hace unas semanas montamos las Schwalbe Marathon GT 365 en una de nuestras bicicletas de prueba, en este caso una Cannondale Bad Boy de hace unos cuantos años. El propósito, comprobar en primera persona si esas cubiertas que Schwalbe anuncia como “ideales para trekking, rutas con alforjas o ciudad, para todo el año y para todo tipo de condiciones”, era absolutamente cierto. El veredicto, dentro de unos cuantos párrafos.
En primer lugar, debemos decir que las cubiertas que hemos probado eran las 700x35C para ruedas de 28 pulgadas (el catálogo de Schwalbe ofrece otras medidas), un tamaño muy apropiado para nuestros recorridos más habituales, casi siempre sobre el asfalto o por pistas no demasiado exigentes. Por otra parte, elegimos instalar las cubiertas en una de nuestras bicis más utilizadas, una preciosa Cannondale Bad Boy de 2014, en lugar de en alguna eléctrica de test, aunque las Marathon GT 365 están certificadas (certificación ECE—R75) para ser usadas en e-bikes y a una velocidad de hasta 50 kilómetros por hora.
Instalación
Sin problemas. Para instalar las cubiertas bastaron un par de desmontables y, con la ayuda de un hinchador Eltin, en apenas veinte minutos las Schwalbe estaban listas para ser usadas. Según la marca, estas Marathon GT 365 tienen una calificación de 6 sobre 7 en protección, lo que las hace recomendables (insistimos, hay que fiarse de toda una referencia como Schwalbe) para casi cualquier uso y condición del suelo sobre el que rodemos. Para empezar a hacerlo, la recomendación de presión es entre 35 y 65 psi, optando en nuestro caso por, aproximadamente, 60. ¡Nos gusta sentirnos con mucho aire debajo para ir a toda velocidad, y sentimos que de estas cubiertas vamos a podernos fiar!
Para hacernos una mejor idea de las cubierta, añadir que su compuesto con un protector antipinchazos doble, denominado Dual Guard. Eso implica tener una carcasa con doble protección, capa de nylon y una mezcla blanda de caucho de 2,5 milímetros de grosor. Este compuesto debe protegernos de las imperfecciones u objetos cortantes o afilados con los que nos crucemos, evitando así daños. A nosotros, desde luego, nos ha servido: en todos los kilómetros rodados (trayectos relativamente frecuentes, combinando asfalto con tierra o grava) no hemos tenido ningún problema. Y eso es una buena noticia, porque hay que reconocer que, con otros compuestos… ¡Sí los habíamos tenido!
Punto delicado. Punto vital: el dibujo de las Schwalbe Marathon GT 365. Como puede verse en las imágenes que acompañan a este texto, tienen un dibujo que podríamos definir como muy polivalente, en el que se rehuyen los tacos agresivos para rendir bien en cualquier tipo de terreno. Como es lógico en unas cubiertas apellidadas “365”, la idea es que las usemos todos los días del año, evitando cambios de cubierta y ofreciendo un rendimiento bueno en distintas superficies. Y así ha sido… E incluso me atrevería a definir ese rendimiento como excelente, y no simplemente bueno. Hemos rodado en asfalto seco, sobre barro (no demasiado blanco, claro), gozando en todo momento de una sensación total de control. Quizá sobre gravilla el rendimiento era algo inferior… ¡Pero es que no se puede ser perfecto en todo, y estas Schwalbe están pensadas para, probablemente, rodar sobre superficies más sencillas!
Para terminar en este apartado: la marca incide en los flancos TwinSkin, que define como “una capa adicional de caucho en los flancos que protege contra los cortes y mejora el aspecto de la superficie”. ¿Alguien ha hablado de aspecto? Porque sí… El de las Schwalbe es, como en cualquier modelo de esta firma, impecable. Son bonitas sin instalar. Pero instaladas sobre mi Bad Boy quedan… espectaculares. Basta mirar las fotos, pero al natural son mejor. Y lo que sigue llamando la atención de la gente: estas Marathon GT 365 cuentan, no podía ser de otro modo, con unos reflectantes laterales para sus usuarios de asfalto. Y sí, reflejan, y mucho, la luz. La apariencia es excelente. Pero, y esto es lo importante, la seguridad es aún mayor. Añadamos al concepto “365 días al año” el de 24 horas al día, para saber que si apostamos por ellas tendremos cubiertas para un uso muy, muy intensivo.
Rendimiento
Peso más de ochenta kilos y la tracción es excelente. También el agarre, en condiciones deportivas, moviéndonos con agilidad en el tráfico, es óptimo. Si estamos de prueba… Estamos de prueba, así que a tope. Buscábamos baches, imperfecciones, algún que otro agujero y más de un bordillo. Y, casi un mes después, evidencias de uso… pero ningún daño ni desgaste. Sin daños, sin pinchazos, sin explosiones. Si hay tiempo, os contaremos dentro de un año, porque con este tipo de productos los test de largo recorrido son todo un placer.
De momento, rodamos todos los días (o casi todos, porque por suerte y nuestro trabajo tenemos la oportunidad de cambiar con frecuencia de bici) y cero inconvenientes. Seguiremos informando: a día de hoy, desde luego, nuestro balance es impecable. Las Schwalbe Marathon GT no nos han dado ningún disgusto, y sí muchas satisfacciones: las de sentir que rodamos rápido, con seguridad tanto activa como pasiva y, parece, una muy buena resistencia a los pinchazos y demás imprevistos. Así que… ¡solo nos queda recomendarlas!
