Es, además de uno de los máximos responsables de las políticas de tráfico y transporte de la ciudad holandesa de Utrecht, embajador internacional de la Oficina de la Bicicleta de los Países Bajos. Su pasión por la bicicleta le ha llevado a emprender todo tipo de aventuras: la más reciente, pedalear desde su ciudad hasta Lisboa para participar en Velo-city, donde fue parte de una apasionante conferencia sobre autopistas ciclistas. Herbert Tiemens llegó a la capital portuguesa tras recorrer más de 2.500 kilómetros en los que cruzó media Europa y, por supuesto, también la Península Ibérica.
Herbert Tiemens viajó en bicicleta desde su ciudad, Utrecht, hasta Lisboa, donde se celebraba Velo-city.
"Cuando se anunció que Velo-city se celebraría en Lisboa", nos cuenta, "pensé que sería difícil llegar hasta allí en tren. Volar desde Utrecht a Portugal no era una opción: mi hijo no me habría vuelto a mirar a la cara si llego a tomar un avión para asistir a una conferencia en Europa". Basta con escuchar un argumento así argumento para comprender hasta donde llega la pasión de Tiemens por la movilidad sostenible y, por extensión, la bicicleta, en torno a la que lleva trabajando más de dos décadas. Tras dar consejos sobre políticas e infraestructura ciclista a consultores, funcionarios y políticos de varios países a lo largo de veinte años, Tiemens aprovechó unas largas vacaciones y el estar por fin vacunado contra el covid para, el 19 de junio, salir de su ciudad, Utrecht, una de las más ciclistas de los Países Bajos, rumbo a Velo-city. Decidió el itinerario tras consultarlo con la comunidad ciclista de Twitter, pero siempre sabiendo que lugares como París (escenario de una de las revoluciones ciclistas del momento) o Chalons sur Saone (un precioso pueblo de la Borgoña por el que discurre la ruta EuroVelo 6) serían paradas obligadas.
"Aunque tenía ya sentadas las bases de mi ruta, que seguí a través de Naviki y BRouter (dos aplicaciones de navegación especializadas en ciclismo), fui modificándola con el paso de los kilómetros. El cubrir distancias más largas de lo que pensaba, por ejemplo, me permitió pasar por Barcelona y Madrid, y tenía marcadas otras en el mapa como Montpellier o Zaragoza". La ruta completa, que puede encontrarse en Strava, detalla el viaje de Herbert, que durante todo este tiempo ha dormido en una pequeña tienda de campaña o, de vez en cuando, en casas de activistas de distintas ciudades y hoteles. "La ruta ha sido perfecta para mí", celebra, "porque no me importó en absoluto rodar largas distancias rectas, junto a los canales de Bélgica o Francia, o a través de los infinitos campos de España. También, para conocer la infraestructura y hablar y animar a los activistas locales, visité ciudades a las que nunca habría ido en bicicleta, porque para un holandés suelen ser demasiado caóticas y, en resumen, no demasiado apropiadas para unas vacaciones".
Durante su periplo europeo, ha habido lugar para las sorpresas positivas. "Lyon fue una de ellas", reconoce, "porque solo la conocía desde el asiento trasero del coche de mis padres, cuando era pequeño, y recordaba un lugar lleno de atascos. Sin embargo, es una ciudad muy bonita, vibrante, y en la que cada vez hay más ciclistas gracias a la construcción de una buena infraestructura". ¿Y en España? "El comportamiento de la mayoría de los conductores es ejemplar", asegura, "pero Madrid… es una excepción. ¡Es caótica e, incluso en pleno mes de agosto y con con menos tráfico, debes tener mucho cuidado al pedalear por allí!"
"El comportamiento de la mayoría de los conductores españoles es ejemplar. ¡Pero Madrid es caótica, debes tener mucho cuidado allí!"
Girona, Barcelona, Lleida, Zaragoza, Madrid, Ávila, Salamanca, Ciudad Rodrigo… La lista de ciudades españolas visitadas es amplia, y permite a Tiemens recabar conocimientos y compartir impresiones. Por ejemplo, le llamó la atención la "inmensidad" de los campos de España, mucho más grandes que los que está acostumbrado a surcar en los Países Bajos. Lamenta "la falta de sombra" en la mayoría de nuestros caminos ciclistas, y le sorprende la cantidad de pequeños pueblos y ciudades "donde la gente tiene todo tan cerca que no necesitan ni bicicleta ni coche para desplazarse". Destaca, claro, "la gran hospitalidad y deliciosa comida que he probado en todo vuestro país". Y, en cuanto a la bici, confirma que "el ciclismo en España es mucho más un deporte que un medio de transporte. Es curioso ver, los domingos, a la gente yendo en coche hasta un carril bici para salir a pedalear: a diferencia de lo que pasa en los Países Bajos, el pedalear no se contempla como una actividad cotidiana".
Ciudad a ciudad
Girona: "La conocía como un lugar importante para los ciclistas profesionales, por eso me sorprendió encontrar carriles bici separados del tráfico. Pero, al igual que en Francia, comprobé que no está bien señalizados, y hay que prestar atención a por dónde siguen en cada intersección".
Barcelona: "Tiene una red ciclista bastante completa, pero tampoco está bien señalizada. Llama la atención la diferencia entre los carriles bici antiguos, muy estrechos, y los nuevos, más amplios. Como algo excepcional, al menos la ciudad entiende que el ciclismo es una actividad social y para toda la ciudadanía. Respecto a las super manzanas… son, desde luego, un gran invento para limitar el tráfico de automóviles y estimular la vida en la calle, además de ahorrar muchos semáforos".
Zaragoza: "Es una gran ciudad. Cuenta con una red ciclista bastante completa pero aún insuficiente para absorber un posible crecimiento del tráfico de bicicletas. En particular, la confluencia con el tranvía, y el espacio 'compartido' en sus paradas, causarán problemas. La ausencia de aparcamientos de fácil acceso en las estaciones también es notable, pero podría solucionarse con relativa facilidad siempre que exista una voluntad política".
Madrid: "Hay una total ausencia de voluntad política, y las ciclovías que hay son absolutamente insuficientes para conformar una red segura. Los carriles ciclistas a la izquierda de la zona de autobuses, o a la derecha del tráfico, son muy peligrosos. ¿Por qué, por ejemplo, no se invierte la posición de carriles bus y vías ciclistas?"