España ha empezado a lo grande la tercera edición del Mundial de Ciclismo Urbano de la UCI, que se disputa en la ciudad china de Chengdu. Con una puntuación total de 580 puntos, la selección española se impuso a los combinados de Alemania y Francia, a los que superó en 20 y 60 puntos, respectivamente, enfundándose así el preciado maillot arcoiris.
La formación española está compuesta por los júnior Alejandro Montalvo y Martí Arán y los élite Ion Areitio, Sergi Llongueras e Irene Caminos. Todos ellos, dirigidos por Manuel Mateo.
La selección española llegó a la ciudad china de Chengdu la noche antes de la competición
La gesta española cobra una dimensión aún mayor si se tiene en cuenta que llegaron a la ciudad china la noche anterior tras un largo viaje. “Estábamos cansados”, explicó Irene Caminos tras la prueba ” pero hoy nos lo tomamos muy en serio y esta medalla de oro es una gran recompensa para el equipo. Ahora es el momento de los eventos individuales”.
La unión hace la fuerza
Tras bajarse del podio, Ion Areitio también mostró su satisfacción. “Estoy muy feliz, es increíble conseguir el jersey arcoíris, ya sea de forma individual o por equipos. No ha sido mi mejor actuación la de hoy, pero todos juntos lo hemos logrado haciendo un gran trabajo. Hemos visto que en España hay nivel, esperemos que esto solo sea el principio y de aquí al fin de semana caigan más logros de todo el equipo”, declaró.
Este jueves llega el turno para los júnior Alejandro Montalvo, gran favorito, y Martí Arán, que competirán en 20″, y las féminas élite Irene Caminos y Alba Hidalgo.
Como ocurre con el resto de pruebas de la Unión Ciclista Internacional, la marca suiza de relojes Tissot es, además de patrocinadora oficial de la cita, la encargada de cronometrar un evento que, esperamos, siga trayendo alegrías a todos los aficionados españoles al ciclismo.