Cultura ciclista

Las bicicletas eléctricas no necesitan seguro obligatorio, salvo que sean speed pedelecs

La nueva normativa estatal sobre el seguro obligatorio para vehículos personales ligeros no afecta a la mayoría de bicicletas eléctricas que circulan a diario por Europa. La ley es clara: las e-bikes siguen libres de seguro, matrícula o registro, excepto las de alta velocidad, que continúan asistiendo pasados los 25km/h.

La norma, aprobada recientemente en el Congreso, exige contratar un seguro de responsabilidad civil únicamente a los vehículos personales ligeros que cumplan tres condiciones: estar registrados en la DGT, contar con certificado de circulación y llevar matrícula o etiqueta identificativa. Es decir, patinetes eléctricos y otros dispositivos similares, pero no bicicletas.

Las bicicletas eléctricas con asistencia al pedaleo que no superan los 25km/h y cuyo motor no excede los 250W, quedan excluidas expresamente. Tampoco necesitan seguro ni permiso de circulación, porque no se consideran vehículos a motor.

Cuadro comparativo de la normativa actual.
Cuadro comparativo de la normativa actual.

Speed pedelecs: sí, ahí cambia la cosa

La única excepción ciclista a esta norma son las llamadas speed pedelecs: bicicletas con motor que continúan asistiendo al ciclista hasta los 45km/h y que, en no pocas ocasiones, incorporan un acelerador independiente del pedaleo. En estos casos, sí se requiere seguro, matrícula y permiso de circulación, ya que la ley las equipara a los ciclomotores, así como el casco obligatorio y la prohibición de circular por carriles bici.

Desde ConBici, coordinadora de referencia en defensa de la bicicleta, celebran la claridad normativa, pero alertan del peligro de confundir al público. “Confusiones de este tipo son a menudo usadas malintencionadamente para equiparar bicicletas de pedaleo asistido y vehículos personales ligeros en toda circunstancia”, explica Julio Romero, coordinador del Área de Movilidad. Y añade: “Lo que constatan este tipo de confusiones, muchas veces interesadas, es la necesidad ineludible de diferenciar claramente en la comunicación entre bicicletas y patinetes eléctricos, tal y como ya hacen las normativas española y europea”.

Zaragoza, en el punto de mira

La aprobación de esta norma refuerza además el recurso interpuesto en Zaragoza por el colectivo Bielas Salvajes, junto con Zaragoza Ciclista, el Colectivo Pedalea y ConBici, contra la Ordenanza de Movilidad del Ayuntamiento, que pretendía imponer un seguro obligatorio a todas las bicicletas. Una medida que, tras la reforma de la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor, queda sin sustento legal.

La bicicleta, recuerdan desde ConBici, “es un modo de transporte saludable, ecológico y clave en la transición urbana”, y por tanto necesita “legislación clara y comunicación rigurosa”. Todo lo demás, dicen, solo sirve para entorpecer su impulso.