Holanda es referencia incuestionable en lo que a ciclismo urbano se refiere. De ahí que Bob Schiller, responsable de Epo Bicycles, quiera reivindicar un producto de casa, cuya producción e industria no tenga que salir de los Países Bajos.
“Todo el mundo usa la bici aquí, incluso nuestro primer ministro para ir a trabajar. El ciclismo es parte de nuestra cultura y lo ha sido durante siglos. Sin embargo, no tenemos un modelo holandés, moderno y asequible en nuestras calles desde hace tiempo”, explica Schiller, quien pretende reactivar la industria local, evitando tener que subcontratar su fabricación en países como China o Taiwán.
Fabricada de aluminio, su montaje está inspirado en la industria del automóvil
La Epo, su nueva apuesta, es muy ligera y cuenta con un diseño único y elegante. Su montaje se ha inspirado en la industria del automóvil, imitando el proceso de prensado y soldado de las dos láminas de aluminio con las que está fabricada y que favorece su resistencia. Un proyecto que, gracias su bajo coste -que reduce significativamente el la mano de obra- y su alta eficiencia, tiene garantizada su producción en el país de las bicicletas por antonomasia.
Por el momento, las Epo siguen en desarrollo y no será hasta 2015 cuando veamos estos flamantes modelos blancos rodando por las calles de Holanda.