Arte público. Arte callejero. Arte gratuito. Acostumbrados a la ocupación constante del espacio público por parte de mensajes comerciales, es tan sorprendente como agradable cruzarse, a diario, con una obra de arte enorme que, además, invita a una reflexión. A la acción. A moverse pedaleando. Es lo que desde hace unos días se encuentran cada día los que pasan por la calle Porvenir, en Valladolid, donde luce radiante la obra El porvenir se defiende hoy.
El porvenir se defiende hoy es fruto del trabajo de Reskate Studio, un colectivo artístico formado por la donostiarra María López y el barcelonés Javier De Riba. “Somos muralistas”, nos explica Javier, “y la obra es parte del festival Distrito Vertical, en el que ofrecen muros de Valladolid y los artistas ponemos, libremente, nuestra idea”.
En este caso, la idea de María y Javier fue esta mujer ciclista: “En nuestros murales mezclamos ilustración y lettering y, aunque tengamos una gran influencia de la publicidad clásica, siempre echamos en falta que, en la calle, ocupe el lugar que podría dedicarse a mensajes que fomenten el bien común. ¿La ciclista? Nosotros llevamos años moviéndonos en bici y la consideramos parte de un activismo, el de recuperar el espacio público para las personas, muy interesante. Aquí cuadraba todo: el nombre de la calle es Porvenir, una palabra preciosa, y nos servía para transmitir la idea de que ese porvenir, ese futuro, no viene solo sino que podemos trabajar en él. Además, queríamos que fuese una ciclista, porque en la historia del arte la mujer ha jugado un rol más pasivo y, en este caso, era fundamental mostrarla como eje activo para cambiar y mejorar la sociedad”.
El mural ocupa casi cien metros cuadrados, y permanecerá en la calle Porvenir todo el tiempo que así lo quieran sus vecinos
El mural, que ocupa casi cien metros cuadrados, exige un paso inicial: investigar el entorno en el que se ubicará. Como explica De Riba, “es obligatorio que la obra tenga sentido en el lugar en el que se pintará, que la gente de esa calle la abrace, se identifique con ella y desee protegerla. Una vez decidido, tuvimos que darnos prisa: los festivales te exigen que termines rápido y, además, no hacía muy buen tiempo. Así que traspasamos, mediante cuadrículas, el diseño que teníamos dibujado, y después lo fuimos rellenando con colores planos, imitando una rotulación clásica y con una clara influencia de la publicidad retro”.
Según explican sus creadores, la obra permanecerá en los muros de la calle Porvenir hasta que los vecinos quieran. “Nuestro trabajo”, dice De Riba, “acaba en cuanto terminamos de pintar. El mural es de los vecinos, y ellos deciden cuánto durará. Normalmente permanece muchos años y, si se empieza a degradar, o nos dicen que lo restauremos o lo hacen directamente los vecinos”. Y, en ese sentido, están tranquilos por la buena acogida: “Todo fue muy fluido”, cuenta Javier. “Siempre hay dudas durante el proceso, sobre todo cuando estás al principio y no saben cómo terminará, pero nos arroparon mucho y estamos muy agradecidos de la acogida. Como siempre apostamos por incluir textos, en ocasiones hay gente a la que no le gusta: en este caso, todos estuvieron de acuerdo con que el porvenir se defiende hoy, y que aunque a veces la palabra nos resulte ajena, exige nuestra implicación”.
Además de en Valladolid, la obra de Reskate está disponible también en lámina tamaño 50 x 70 centímetros. Se imprimirán a finales de mayo: aquellos que quieran comprarla, tienen un descuento: ahora cuesta noventa euros, que serán cien euros una vez la serie esté en la calle.