Ciudades

“La bicicleta debería gustarle a la derecha, porque una sociedad eficiente y productiva gasta más y es más rica” (Steven Fleming)

Ciudades… rodantes. Steven Fleming, responsable de CycleSpace, es uno de los arquitectos más comprometidos con la bicicleta del mundo. Fleming está en La Ciudad de las Bicis, en Zaragoza, donde acaba de participar en la charla “Arquitectura y Diseño, Teoría del espacio ciclista y la bicicleta como protagonista de arquitectura y diseño”.

Muchos le consideran un genio. Algunos, en cambio, consideran sus propuestas inhumanas e, incluso, delirantes. El hecho es que Steven Fleming es autor de distintos proyectos arquitectónicos en torno a la bicicleta, tan atrevidos como, desde luego, originales y lejanos a la realidad actual.

“A principios del siglo XX había pocos coches y carreteras”, dice Fleming en La Ciudad de las Bicis, “pero los arquitectos ya pensaban en los coches cuando fantaseaban con la ciudad del futuro. Algo parecido debe ocurrir ahora con las bicicletas: los arquitectos debemos imaginar un futuro perfecto, y este debe estar lleno de ciclistas”.

Para Fleming, muchos desplazamientos, a la fuerza han de hacerse sobre ruedas, y la bici es la forma más limpia y saludable de realizarlos

Durante su presentación, en la que le acompañó Jordi Galí, arquitecto y ciclista miembro de Copenhagenize, Fleming mostró el que, en su opinión, debe ser el camino a seguir por edificios del futuro. Rampas que nos conducen, pedaleando, hasta nuestro puesto de trabajo. Casas con aparcamientos transparentes y exclusivos para bicis. Y hasta tejados donde los ciclistas pueden moverse con todas las facilidades. “Andando se puede llegar a sitios cercanos”, explicó Fleming, “pero para ir al trabajo, la universidad, el teatro o una discoteca es probable que tengamos que recorrer una distancia larga. Si lo hacemos en coche, tendremos barrios feos y atascos, además de sedentarismo. Si usamos el transporte público este se congestionará y se hará más desagradable, además de no fomentar el ejercicio entre la población. En cambio, la bici es limpia y saludable”.

Propuesta de Steven Fleming y Cyclespace (http://cycle-space.com/)
Propuesta de Steven Fleming y Cyclespace (http://cycle-space.com/)

En su opinión, uno de los mayores problemas de los ciclistas urbanos es la dificultad de aparcar de forma segura y cómoda sus monturas. Para eso debe fomentarse “la arquitectura de la bicicleta, algo que resulte cómodo y práctico. No hablo sólo de aparcamientos: también de intentar proteger, en la medida de lo posible, a los ciclistas de la lluvia”.

También, por supuesto, Fleming reflexionó sobre cómo es vista todavía la bicicleta por muchos. “A los que me dicen que la bicicleta es algo sucio, les digo… ¿Y qué me dices de los zapatos? Si llevas tus zapatos, que han pisado la calle, hasta tu puesto de trabajo… ¿Por qué no hacer lo mismo con tu bici? La bicicleta sustituyó para muchos al caballo, y los caballos se hacen caca. Pero las bicis no”.

“A la gente no le gusta mi visión porque es pura”, dice Fleming de las críticas

Le pregunto a Steven Fleming qué le parecen las críticas, aquellos que definen sus propuestas como inhumanas, irrealizables o, directamente, pesadillescas. “A la gente no le gusta mi visión porque es pura”, asegura. “Para empezar”, explica, “es cierto que una ciudad completamente ciclista es algo, teóricamente, irrealizable. Pero partimos de hechos reales. El casco antiguo de las ciudades suele estar cruzado por vías de tren, cerca de las que crecieron las zonas comerciales, residenciales y fábricas. Suele tener una forma de cruz: entre medias, lo hemos llenado de coches. Lo hemos inutilizado. Las capas se han entrelazado, se han superpuesto. Nosotros combinamos todos esos espacios pero intentamos sumarle una Ciudad Ciclista, una capa adicional para bicis. Sólo la imaginamos. No la vamos a realizar, pero sí podemos acoplarla a las zonas industriales abandonadas, recuperando canales o vías férreas inutilizadas para conectarlas. En vez de aparcamientos para coches, zonas para ciclistas”.

Según explica, la ciudad ciclista que proponen en CycleSpace tendría 15 kilómetros de diámetro, donde vivirían seis millones de habitantes con una densidad de población alta. El desplazamiento medio sería de seis kilómetros y duraría unos 30 minutos. Una forma de vivir que, en su opinión, tendría que ser aplaudida por los políticos liberales y derechistas. “La bicicleta debería gustarle a los políticos de derechas”, argumenta, “porque una sociedad más eficiente y productiva crece y gasta más y es más rica”.