Hace unos años, circuló por Internet el vídeo de una bicicleta que se conducía sola. En realidad, se trataba de un ‘fake’ lanzado por Google con motivo del April Fools Day, la versión anglosajona del día de los Inocentes, en el que muchas webs lanzan noticias falsas. Fueron muchos los medios que mordieron el anzuelo, aunque desde Ciclosfera lo vimos claro: aquello olía a broma a kilómetros.
Lo que te contamos hoy no tiene nada de broma: aquella bicicleta ya es una realidad. Un grupo de científicos chinos de la Universidad Tsinghua de Pekín ha creado un chip, denominado Tianjic, capaz de dotar de inteligencia artificial a una bicicleta, consiguiendo que ésta funcione de manera completamente autónoma.
Según explican los responsables del invento en la prestigiosa revista Nature, el chip puede ejecutar algoritmos de aprendizaje automático, gracias a una serie de circuitos inspirados en el cerebro humano. Y así, la bicicleta autónoma es capaz de mantener el equilibrio, evitar los obstáculos que se encuentre por el camino, recibir instrucciones por voz e incluso seguir a otras personas.
El chip Tianjic es sólo el primer paso paso hacia lo que denominan la “inteligencia general artificial”
El resultad se puede ver en un vídeos publicado en YouTube que muestra dos escenarios diferentes: en el primero, la bicicleta supera eficazmente un obstáculo y obedece a comandos de voz para cambiar de dirección y ajustar la velocidad. En el segundo sigue a una persona, sorteando una serie de conos por el camino.
El secreto del movimiento autónomo de la bicicleta reside en que el chip Tianjic es capaz de ir realizando las distintas tareas sobre la marcha, casi como si fuera aprendiendo con cada nuevo movimiento, de manera similar a si se tratase de un cerebro humano.
Según los creadores de esta singular bicicleta, el chip Tianjic es sólo el primer paso paso hacia lo que denominan la “inteligencia general artificial”: máquinas que sean capaces de hacer cualquier cosa que los humanos y nuestros cerebros somos capaces.