Astore Tranpo: piel de invierno

La Tranpo de Astore cumple con lo prometido: es cómoda, ligera, bonita y, sobre todo, abriga. Mucho. Casi sin darnos cuenta, rodamos con ella bajo la lluvia, el viento y el frío, y en ningún momento sentimos que las bajas temperaturas nos afecten.

Para empezar, la Tranpo destaca por su tecnología. Como otros modelos de Astore, está hecha con tejido S-CAFÉ, un material ecológico elaborado con hilos y procedente del reciclado de los posos del café. Una buena forma de utilizar los residuos y convertirlos en un tejido con múltiples virtudes.

Mucho calor… sin olor

Una de ellas, y es absolutamente cierto, es el control del olor. Por supuesto, hay que lavar la Tranpo con cierta frecuencia si la usamos casi todos los días, pero es muy raro que en algún momento suelte el desagradable aroma de ropa sudada. Ese ya es un buen motivo para estar satisfecho con esta prenda: a menos que hagamos demasiado “el guarro”, difícilmente nos dejará en evidencia tras nuestros sudores ciclistas.

Está fabricada con un material ecológico procedente de los posos del café

Una vez puesta, la Tranpo es muy cómoda. Encima de una camiseta adecuada se ciñe al cuerpo perfectamente, ajustándose gracias a la elasticidad del tejido y permitiéndonos, gracias a su abertura en el pulgar de cada mano, evitar la entrada de frío por las mangas. Si, además, nos ponemos la capucha, la Tranpo nos ofrece una protección suficiente (con otra capa encima que nos proteja, sobre todo, de la lluvia) para rodar en casi cualquier condición climatológica.

Otro motivo por el que nos gusta la Tranpo es, por qué no decirlo, su estética. Es una prenda “sufrida”, para hacer muchos kilómetros, para lavar con mucha frecuencia, pero es muy atractiva. Sienta bien. Es negra, pero tiene unas discretas costuras verdes que realzan su elegancia. El corte es magnífico. No es para ir a una cena de gala, pero sí para ir cada día a trabajar y no sentir que vas disfrazado.

Cara, pero muy recomendable

Con un precio recomendado de 95,95€, la Tranpo no es un producto barato. ¿Vale la pena? En nuestra opinión… Sí. Es cara, pero puedes usarla todos los días: se seca muy rápido,  si la lavas por la noche la tendrás lista para la mañana siguiente. Tras un mes de uso intensivo, no muestra el menor síntoma de desgaste. La cremallera funciona perfectamente, algo que no ocurre con otras prendas de igual o mayor precio. Da calor. Y, como pasa siempre con la buena ropa… Uno termina hasta cogiéndole cariño. Son muchas horas sobre la bici en estos días de invierno, y gracias a la Tranpo, de momento, no hemos cogido un catarro. ¡Otra taza de S-CAFÉ, por favor!