El concepto de Vision Zero fue desarrollado en Suecia. Defiende la idea de que en el ámbito vial no es aceptable ninguna pérdida humana: cero muertes y discapacitados graves en siniestros viales. El abordaje desde Visión Cero toma en cuenta los errores humanos como inevitables, y al sistema vial como el responsable de cuidarnos.
De los tres factores involucrados en el medioambiente vial, siempre se busca controlar y penalizar el factor humano. Pero el diseño vehicular y el diseño de infraestructura pueden marcar diferencia para evitar muertes y daños de gravedad en siniestros viales.
Libertad solo para algunos
Los sistemas de transporte son diseñados según su capacidad de carga, comodidad y velocidad. Están pensados desde el deseo individual de quien lo compra y se promociona atendiendo esos deseos. Pero cuando ese vehículo ingresa en el medioambiente vial, pasa a interactuar con otros vehículos y a ser parte de un sistema que involucra peatones y ciclistas.
La libertad de movimiento que promete el automóvil es, en las ciudades, una fantasía. Si a eso le sumamos todos los perjucios que conlleva (polución, congestión, cambio climático, heridos y muertes) hace evidente que debemos volver a pensar en qué ciudades queremos vivir (y no morir). Y es que, ppara las personas entre 15 y 29 años, los siniestros viales ya son la manera más común de morir (según visionzeroinitiative.com). ¿Queremos que todas estas muertes sean el precio a pagar por la movilidad y la libertad? ¿No deberíamos poder movernos libremente sin esperar la muerte a la vuelta de la esquina?
Errar es humano
El concepto de Vision Zero comienza con una afirmación: somos humanos y cometemos errores. Es desproporcionada la importancia que le damos a algunos factores de riesgo, en relación a otros, como la velocidad. No juzgamos a la velocidad como un factor de riesgo real y nos permitimos circular hablando por teléfono, bebiendo y conversando.
Entonces, los sistemas viales, ¿Están pensados para seres humanos o para conductores teóricos inexistentes? ¿Por qué se ha permitido a los automóviles circular a velocidades muy por encima de las máximas seguras y permitidas? Los automóviles pasan a 100 km/h al lado de un niño y el automovilista no lo ve como un riesgo. Por otra parte, en muchos países es muy fácil obtener la licencia para conducir.
Vision Zero propone que el sistema debe dar por sentado que el ser humano ya no se equivoca, sino que juzga mal, y no debe permitir que ese error llegue a término.
La bicicleta
En estos últimos años ha habido algunas mejoras tecnológicas en los automóviles: detectores de distancia , control de velocidad, control de alcohol… Quizás el más esperanzador pueda ser el vehículo auto-controlado, que hasta ahora ha demostrado ser bastante respetuoso con el entorno.
Pero también el transporte en bicicleta es un gran aporte a la seguridad del medioambiente vial y, por lo tanto, está en perfecta sintonía con el concepto Vision Zero.
– Son vehículos lentos, la velocidad promedio de una bicicleta es de 20 km/h. La velocidad a la que el ser humano puede reaccionar son 30 km/h. Por lo cual, las velocidades a las que se manejan las bicis están dentro de los parámetros seguros.
– Son vehículos livianos, en caso de colisión, un vehículo con menor masa produce menos daños. Difícilmente una bicicleta pueda producir la muerte, como sí la provoca el auto de manera cotidiana.
La bicicleta es generalmente un vehículo individual, pero que no excede la medida humana. Ni en velocidad, ni en tamaño, ni en residuos contaminantes. Las soluciones según este concepto son múltiples, pero sin duda, la promoción del ciclismo urbano es una de ellas. Es parte de un sistema vial saludable, y la vuelta a una práctica que nunca debió abandonarse.