El informe pone de manifiesto un significativo crecimiento en el uso de este vehículo en los últimos cuatro años, desde la última edición de este mismo estudio en 2011, y también en la intensidad con la que se utiliza, especialmente en cuanto a los desplazamientos cotidianos.
Así, la mitad de los españoles es usuaria de bicicleta con alguna frecuencia, nueve puntos más que hace cuatro años, y uno de cada diez la utiliza a diario. Además, tres de cada cuatro tienen bicicletas en su casa y dos tercios disponen de al menos una para uso personal.
En bici al trabajo
Alrededor de una cuarta parte de los usuarios que trabajan o estudian utilizan la bici para ir al trabajo o al centro de estudios y uno de cada diez la usa a diario. En ambos indicadores las cifras mejoran respecto a 2011, igual que la cifra de los que la usan para otros desplazamientos cotidianos, que roza el 60% entre los usuarios. En cambio, se observa cierto estancamiento en la intensidad del uso de la bici de forma recreativa (paseo o deporte).
El perfil del usuario de bicicleta sigue siendo el habitual. Los hombres, los menores de 40 años y los que cuentan con formación superior son los que más la utilizan, mientras que las mujeres, la gente mayor y los que tienen un nivel de estudios bajo son los que muestran menor interés por la misma.
No se observan grandes diferencias en número de usuarios según tamaño de municipio, aunque sí en cuanto al uso que se le da a la bicicleta: en las ciudades, especialmente las grandes, se usa más para ir al trabajo o a estudiar, mientras que en los pueblos, sobretodo los más pequeños, se utiliza de forma más intensa para pasear o hacer deporte. Por comunidades tampoco hay grandes diferencias, si bien es cierto que es en Euskadi donde se registra mayor número de usuarios y en Canarias, donde se da la menor proporción.
Miedo a la calzada
Cuatro de cada diez usuarios dicen circular siempre por la calzada compartiendo el espacio con los vehículos de motor, pero una cuarta parte no lo hace nunca, sobretodo porque considera que es peligroso.
La mitad de los que usan la bicicleta a diario dice circular siempre por la calzada y, de hecho, se observa que a medida que aumenta la intensidad en el uso de la bicicleta, crece la proporción de usuarios que siempre circula compartiendo espacio con los vehículos a motor.
En cambio, a medida que crece el tamaño del municipio, aumentan también los que dicen no circular nunca por la calzada. También se observan diferencias importantes por sexo, ya que las mujeres lo dicen mucho más que los hombres.
Nueve de cada diez usuarios dicen respetar siempre las normas de circulación cuando van en bicicleta. La gran mayoría afirma respetar siempre el sentido de la vía por la que circula y pararse ante semáforos en rojo. Además, respecto a 2011, crecen los que afirman usar siempre casco por vía interurbana y utilizar las luces cuando falta visibilidad, rozando o superando el 50% en ambos casos.