Trek ha decidido reinventar su modelo Madone para dar forma a una bicicleta que está haciendo correr ríos de tinta. No es para menos: sus características la convierten por méritos propios en una apuesta ganadora para los que buscan lo mejor de lo mejor.
La aerodinámica de la nueva Trek Madone es, quizá, lo primero que llama la atención. La firma asegura que han conseguido un rendimiento muy superior al de sus rivales, tanto en el asfalto como en el túnel de viento, gracias a las singulares y agresivas curvas del cuadro, para el que han optimizado la forma KVF (Kammtail Virtual Foil) de los tubos. El resultado es una bicicleta increíblemente ligera y aerodinámica. Además, la nueva horquilla perfilada incorpora patas aerodinámicas KVF que minimizan la resistencia.
IsoSpeed, integración y estabilidad
Si de algo se muestra orgullosa Trek en su nueva Madone es de haber desarrollado la rótula IsoSpeed, para la que ha invertido 18 meses de investigación sobre el terreno. Una tecnología que permite al tubo del sillín rotar de forma independiente, lo que duplica la absorción vertical sin comprometer la eficiencia del pedaleo.
Trek ha querido, asimismo, hacer especial hincapié en la perfecta integración de todos sus elementos. Todos los cables están perfectamente enrutados en el interior del cuadro para potenciar la aerodinámica. Y por supuesto, la Trek Madone sigue haciendo gala de una postura de conducción única, la H1, más baja y agresiva, con la que los ciclistas que apuestan por Trek obtienen, según la firma, una mayor estabilidad.