Dos marchas de carretera y MTB. Y un denominador común: la solidaridad y la ayuda a las personas que sufren alguna enfermedad crónica o han sido receptoras de algún trasplante. En eso consiste, a grandes rasgos, la Transplant Bike, que este 2017 se celebrará en Bilbao y Lleida los próximos 10 y 24 de septiembre, respectivamente.
Javier Aguirre es miembro de la plataforma Traïnsplant. También, una de las muchas personas que en un momento de su vida necesitó un transplante de riñón. Desde su localidad, Durango, y junto a organizaciones como la fundación renal Jaume Arnó y las sociedades ciclistas Urgozo y Bilbain está organizando la Transplantbike de Bilbao.
¿En qué consiste el trabajo que realizáis desde Traïnsplant?
Traïnsplant es una plataforma que engloba toda la información referente al ejercicio físico para personas con enfermedad crónica o trasplante. Es un lugar de referencia donde encontras pautas sobre los beneficios y contraindicaciones de la actividad física en estos colectivos. Nace de la necesidad de conseguir un espacio donde pacientes y profesionales de la salud puedan acudir para un buen asesoramiento sobre movimiento y deporte.
¿Por qué ese nombre?
Traïnsplant es la unión de dos palabras inglesas “train= entrenamiento” y “transplant=trasplante”. La “Ï” con diéresis hace alusión a los donantes y a las segundas oportunidades. A la vida, en definitiva. El logotipo representa la fuerza, el valor, la donación y el espíritu de superación. Todo ello mediante el movimiento. Existe una versión masculina, una femenina y una infantil.
El ejercicio físico ayuda a mejorar la capacidad funcional facilitando un estado de independencia física
¿Cómo beneficia el ejercicio físico a los enfermos renales crónicos y trasplantados de órganos y médula?
Las personas con enfermedad renal crónica o trasplante de órganos o médula pueden mejorar su salud general mediante la actividad física y son muchos los beneficios que los pacientes obtienen por el mero hecho de ser más activos. Por ejemplo, los ejercicios de resistencia aeróbica, de baja intensidad y de larga duración, tienden a disminuir los marcadores de índices inflamatorios y aumentan el anabolismo en pacientes en diálisis y trasplantados. Este tipo de ejercicio también incrementa el consumo de oxígeno mejorando la capacidad cardiorrespiratoria de individuo, lo que le permite desarrollar actividades de la vida cotidiana con menor fatiga.
Se ha demostrado que, a menudo, personas con tratamiento renal sustitutivo o trasplantados sufren secuelas psicológicas como la depresión y la ansiedad . El ejercicio físico ayuda a mejorar la capacidad funcional facilitando un estado de independencia física y, por tanto, el estado de bienestar evitando situaciones psicológicas adversas. El cansancio de piernas es un síntoma habitual en estas poblaciones y con el entrenamiento de fuerza muscular esa debilidad y fatiga se puede mitigar considerablemente, lo que se traduce en una mejora de la capacidad de caminar, subir escaleras o mantenerse de pie sin cansancio durante más tiempo. Todos los beneficios de la actividad física expuestos anteriormente engloban una meta final: mejorar la calidad de vida de los personas con enfermedad renal crónica o trasplantados.
¿Por qué es importante esta marcha ciclista?
Porque queremos demostrar a la sociedad y en especial a los enfermos crónicos que estan a la espera de un trasplante que después de un trasplante hay una vida normal y de calidad y en la que el ejercicio físico será importante en ella.
¿Cuáles son las necesidades más urgentes a las que irán destinada la recaudación?
Los beneficios irán destinados a investigación y a realizar ejercicio físico intradiális por lo que compraremos una especie de pedales o bicicletas estáticas para ejercitarse en las cuatro horas que dura la hemodiálisis.