Vamos a darte algunas ideas para que puedas convertir tu casa en un espacio en el que se intuya, desde el minuto uno, que tu pasión por la bici es superior a cualquier otra cosa.
Cuelga tu bicicleta
Cantidad de veces hemos escuchado eso de “no tengo espacio en casa para guardar la bici”. Bueno, la bici, además de servirte como medio de transporte habitual, puede servirte como elemento decorativo.
Hoy en día, que ya está casi todo inventado, existen numerosos artilugios que puedes utilizar para colgar la bici en el interior y convertir ese rincón que tienes un poco vacío en uno de los más chic de tu vivienda.
Si buscas por internet encontrarás colgadores de lo más sofisticado para pared o, también, para el techo. Y si eres de los que prefieres darle rienda suelta a tu imaginación, con un par de trozos de madera podrás crear unos colgadores ideales para el salón de tu casa.
La bici en armonía con la decoración
Puede que ya hayas dado el primer paso y la bici ya esté colgada en tu casa. ¿Y ahora qué? Puedes escoger entre dejarlo así, modo minimalista o, por el contrario, añadir elementos que conviertan a esa bici en parte del ambiente.
Eso es precisamente lo que ocurre con la bici que vemos en la foto, en la que el artista ha simulado que está recorriendo las calles de Berlín. Vale, la foto es en una cafetería, pero nos la imaginamos perfectamente en una de las habitaciones de cualquier hogar.
Enmarca una bici
No nos referimos a literalmente a coger una bicicleta, ponerle un cuadro alrededor y colocarla encima del sofá de tu casa. Aunque bueno, todo es probar. Lo que realmente queremos decir es que existen muchísimas fotografías ciclistas que nos transmiten algo, o ilustraciones en las que la bici es la protagonista.
Cualquiera de estas dos opciones es una buena idea para darle un toque ciclista a tu hogar.
Convierte tu antigua bici en macetero
¿Recuerdas esa bicicleta que lleva años guardada sin utilizarse? ¡Va siendo hora de darle una segunda vida! Vamos a darte una idea.
Si lleva demasiado tiempo guardada, posiblemente tenga algunas zonas oxidadas. Lo ideal sería rasparle la pintura vieja y darle una capa nueva de pintura, podrás incluso elegir otro color para darle un toque diferente.
Ese paso, por supuesto, te lo puedes saltar. Después vendría la segunda parte: si tu bici no tiene cesta y portaequipajes, colócale uno. Puede ser lo más sencillo que encuentres, no hace falta que te compliques demasiado.
Y, por último, coloca una maceta en la cesta y dos en el portaequipajes con unas flores bonitas… ¡Vas a ser la envidia de todo el vecindario!
Haz una mesa ciclista
Para esta idea es cierto que vas a necesitar bastante espacio. En el caso de que lo tengas, te proponemos crear una mesa personaliza. Puede ser tanto para interior como para exterior.
En la de la foto se aprecia una mesa y dos bancos. Aunque, claro, los bancos pueden ser sustituidos por sillas sin ningún problema, escoge lo que más te guste.
El toque que marcará la diferencia serán las dos bicis que quedarán en los laterales. Te recomendamos que fijes bien la bici a la mesa y al suelo para que te resulte más cómoda.
Reloj con ruedas
Hay pocos materiales que no se pueden reutilizar de una bicicleta, solo hay que echarle un poco de imaginación. Como, por ejemplo, las llantas.
Con la llanta de una bicicleta antigua podrás hacer un reloj como el de la imagen que, por cierto, quedará perfecto en la cocina de cualquier casa. Sin duda, una manera original de saber qué hora es.