Coast Cycles es una marca nacida en Singapur, y caracterizada por algunas originales propuestas. La Quinn, por ejemplo, es una urbana con un espacio en el cuadro que permite transportar una maleta de forma absolutamente integrada. La Goliath, una polivalente fat bike. Y la marca ahora nos sorprende con la Ruckus, una con una serie de detalles sorprendentes.
El primero, por supuesto, es su bonita y nostálgica apariencia, en la que destaca su asiento: un confortable y extralargo sillín que, además de prometer una comodidad extra, nos permitirá pedalear acompañados.
Sus creadores hablan de que es una bicicleta “para todos”, capaz de “traernos el antiguo placer social de pedalear con otro pasajero. Es un tándem, pero “reducido”.
Una bicicleta “más simple para días más sencillos”. Una montura que la marca ofrece con rueda ancha, manillar integrado a la horquilla (lo que le da, además, una apariencia única), frenos de disco y tres opciones de transmisión: singlespeed, Shimano Claris de ocho velocidades o este último cambio integrado a un motor eléctrico. Su precio, desde 822 euros.