Ocurrió este sábado. La ciclista ilicitana Rosa Alba, del equipo IronBikes Racing Team, se encontraba entrenando en los alrededores de Elche cuando sufrió un atropello que le causó contusiones y un fuerte traumatismo, además de importantes destrozos en su bicicleta. Por si fuera poco, Alba, de 35 años, tuvo que ver cómo, en lugar de auxiliarla, la responsable del atropello se dio a la fuga.
Afortunadamente, otros conductores corrieron a auxiliar a Rosa. Y a las pocas horas -y a diferencia de lo que ocurre en otras ocasiones con este tipo de accidentes- la Policía Local de Elche no tardó en identificar a la responsable y detenerla.
Según relata el diario deportivo As, Rosa Alba regresaba en solitario tras completar el entrenamiento. Apenas le separaba un kilómetro de casa cuando se vio sorprendida por detrás por un Ford K granate. “Iba por el arcén, lo más pegada al lado derecho de la vía, y de repente noté un fuerte golpe. El coche me arrastró, pero me dio tiempo a ver qué coche había sido”, ha reconocido. El atestado realizado por la Policía, junto a la colaboración ciudadana mediante las redes sociales, ha resultado clave para localizar al coche.
La conductora se expone a una sanción, según el artículo 195.3 del código penal, de hasta 18 meses de cárcel si se considera que el atropello fue fortuito o hasta cuatro años de cárcel si se demuestra que se trató de una imprudencia.
El Intendente de la Policía Local de Elche, Senén Ródenas, fue quien comunicó la noticia, en directo, a la ciclista en los micrófonos de Onda Cero Elche: “Dimos un aviso a todas nuestras unidades y localizaron el coche ayer por la tarde, en el caso urbano”, explicó. A la conductora se le van a imputar un delito de lesiones y de la omisión del deber de socorro”. La conductora, según Ródenas, “reconoció el accidente pero ha alegado que no se dio cuenta”.
Rosa Alba, ganadora en la categoría femenina de la última edición de la Marcha Vías del Tren Potríes-Elche, de 140 kilómetros de recorrido, se recupera y cuenta los días para volver a entrenar: “Me encuentro bastante bien, con el susto aún con el cuerpo, pero con ganas de volver a hacer lo que más me gusta”, ha explicado en* As.* Alba ha recordado los problemas que sufren los ciclistas. “Nos ponen cuerdas de tramo a tramo del camino a la altura del cuello que no ves, pinchos y clavos para romperte las ruedas, caminos que llenan de piedras por sorpresa y que te obligan a pedalear con mil ojos”, ha denunciado, al tiempo que espera que su accidente sirva para concienciar a los conductores en el respeto a los ciclistas.