El 22 de diciembre de 2013 fue un día especial en Zoetermeer, una tranquila localidad situada a las afueras de La Haya. El exalcalde Jan Waaijer cortaba la cinta inaugural de una de las infraestructuras más demandadas por los vecinos: un puente ciclista que uniera el sur de la ciudad con el nuevo parque Nieuwe Driemanspolder, y que al mismo sirviera para conectar cuatro grandes rutas ciclistas de las muchas que recorren los Países Bajos.
Cuando los presentes vieron el resultado final del proyecto, ideado por el estudio de arquitectura Syb van Breda, quedaron asombrados. Las fotos del flamante puente no tardaron en inundar las redes sociales, despertando los elogios (y envidias) de ciclistas del mundo entero. Hasta el diario británico The Guardian lo incluyó entre las diez mejores infraestructuras ciclistas del planeta.
"Con todas esas luces parece una estructura alienígena"
"El proyecto nació en 2009, cuando nuestra propuesta ganó el concurso para construir un puente que encajara con la naturaleza del nuevo parque", recuerda el propio Syb van Breda a Ciclosfera. "Fueron tiempos difíciles: la crisis retrasó las obras del parque y, después, las del puente. Pero seguimos adelante y estaba abierto en enero de 2014. El parque estará acabado en 2020, y será entonces cuando el puente luzca en todo su esplendor".
Pura diversión
"Pasé junto al puente en un viaje en tren", recuerda el fotógrafo Alexandre Rotenberg, un apasionado de la cultura ciclista y sus puentes, que ha retratado muchas veces con su Nikon D7000. "En aquel momento supe que tenía que volver para verlo de cerca”. Lo hizo tanto de día como de noche, cuando el puente adquiere un aspecto singular. "Con todas esas luces", bromea, "parece una estructura alienígena".
¿Y cómo es pedalear en él? "Algunos ciclistas lo ven algo arriesgado por sus curvas", reconoce Van Breda, "pero la mayoría están encantados, incluso aunque haya que subir su cuesta arriba en un país tan plano como una crepe". Rotemberg, por su parte, lo tiene claro: "Cruzarlo en bici es pura diversión, y desde allí se puede disfrutar del impresionante skyline de La Haya, que está a unos 13 kilómetros".