En Spiny lo tienen claro: "hemos nacido con la vocación de fomentar el ciclismo urbano" nos asegura Marco Cocchiarella, cofundador de la marca. Y están en lo cierto. El Spiny es un sencillo dispositivo con una facilísima instalación que podrás quitar y poner en cinco segundos (te lo prometemos) para seguir teniendo tu bici de siempre con o sin asistencia, porque no todos los días nos hace falta un motor.
Lo que tenemos ante nosotros es el kit de conversión eléctrica más ligero del mercado. Y eso es mucho decir, porque hay decenas de modelos. No sólo eso, sino que, además, el diseño de Spiny permite algo que no pueden decir muchos: cuando se retira del cuadro, con un click, te llevas todo, es decir: motor y batería. ¡Y además tiene una estética muy atractiva!
En la mayoría de las soluciones que hemos visto hasta ahora, por lo menos aquellas que tienen el motor en la rueda, lo único que podías quitar y poner con facilidad era la batería y la bici quedaba aún con el peso extra del motor.
El diseño de Spiny esconde otro secreto: su ubicación. Está ubicada el punto en el que más eficiente es un motor, justo ahí, bajo el sillín, a media altura del tubo vertical del cuadro. En ese específico punto, la fuerza que el motor tiene que hacer para conseguir mucha más potencia es menor, haciendo que la batería aguante aún más tiempo.
Autonomía satisfactoria
De hecho, en cuanto autonomía, según datos de la marca, podrás alcanzar hasta 50 kilómetros. Es cierto, y ya te lo hemos comentado más veces, que estas cifras son siempre sobre el papel y que, en ocasiones, no suele llegar a tanto, ya que dependen del nivel de asistencia por el que optes más, por tu peso y el de la bicicleta y, claro, por la orografía que vayas a recorrer (cuántas más cuestas debas subir, más esfuerzo realizará la batería).
Nuestra experiencia con Spiny en ese sentido es muy satisfactoria y hemos realizado, con el nivel de asistencia más alto (hay tres diferentes), 25Km y aún nos quedaba algo de batería. Es decir, que si no le exiges demasiado al motor, si pones un poco de tu parte al pedalear, tienes autonomía más que suficiente para los trayectos urbanos, que es para lo que está diseñado Spiny.
El kit de conversión Spiny tiene un precio online de 499€
Por poco y para muchos
Spiny está disponible a un precio de venta de 599€, pero quienes se decidan a comprarlo online pueden aprovechar que está solo por 499€. Esto pone a Spiny también otra medalla: la de tener una relación calidad precio casi imbatible.
¿Pero vale para tu bici? Pues muy rara tiene que ser para que no valga. De todas formas, en Spiny te devuelven el dinero si tu bicicleta no es compatible o si no te termina de convencer el producto. Ahora, te vamos adelantando que te va a encantar, como a nosotros.
Asombra su capacidad de adaptarse a prácticamente cualquier bicicleta convencional del mercado, fixie, carretera, ciudad, MTB, paseo... Y es parte de su encanto, que posiblemente te apetezca tenerlo en dos bicicletas. ¿Por qué no?
Spiny es compatible con la gran mayoría de bicicletas del mercado
Las razones por las que puedes necesitar un Spiny pueden ser infinitas: porque no quieres deshacerte de tu bici de siempre, porque no quieres gastarte un dineral en una eléctrica, porque no tienes sitio para otra bici, porque no siempre quieres usar una eléctrica y con Spiny puedes desmontar fácilmente el sistema... O, sencillamente porque te apetece.
Dicho todo esto, vayamos a ver cómo instalamos un Spiny en nuestra bici convencional.
Spiny: instalación paso a paso
Lo primero que vamos a ver cuando abrimos la caja del Spiny según nos llega a casa es un código QR con las instrucciones para instalarlo. Bien explicadas, sencillas, paso a paso, sin complicaciones.
Hay que extraer la pieza que sujetará el Spiny en nuestro cuadro y atornillarla a la altura adecuada. Para que no tengamos que estar sosteniendo el Spiny con una mano e intentar atornillar con la otra la pieza, el paquete incluye una guía de cartón para que lo hagas fácilmente. Por cierto, la llave Allen viene incluida, algo que se agradece, la verdad.
Todo lo que necesitas para instalar el Spiny en tu bici, viene en la caja, herramientas incluidas
Si tu bici tiene el cableado del cambio o freno trasero en esa parte del cuadro, no te preocupes, la pieza del Spiny está diseñada para que puedan pasar ambos sin tocar nada del dispositivo. Todo va a funcionar como siempre lo ha hecho, pero ahora con ayuda.
Si tienes guardabarros, una de las mejores soluciones que puedes hacer para instalar Spiny, es cortarlo. Sí, así de fácil. Sólo tendrás que reducir la longitud de la pieza cortando desde la pinza de freno hasta el final, de esa manera, tendrás aún disponible y funcionando la parte realmente útil del guardabarros, evitando salpicaduras en la espalda o alforjas y con tu kit de electrificación a pleno rendimiento.
Cortar piezas de la bicicleta es una práctica más que habitual, sin ir más lejos, es muy común acortar el manillar, así que, el guardabarros no debe preocuparnos en absoluto.
Una vez tengamos la pieza puesta en el cuadro (tan sencillo como poner un portabidón) deslizamos el motor y escucharemos un "click". Pero aún faltan los sensores de cadencia y de velocidad.
Antes de poner los dos sensores, te recomendamos descargar la app y otorgarle todos los permisos que te pida de ubicación, bluetooth... etc, porque nos vendrá bien tenerlo todo listo en este momento.
Ambos sensores tienen una pila de botón y, aunque está puesta, hay un plástico que debes quitar para que empiecen a funcionar. Enciende el motor (apretando al botón central con el rayo rojo, logo de Spiny) y abre la app.
Quita ambos plásticos que aíslan la pila y verás que se enciende. Al tener nuestro Spiny y la app en marcha previamente, verás que todo se conecta solo y se enciende una lucecita azul en ambos dispositivos. Ya está todo (casi) listo.
Instala el sensor de cadencia en la biela izquierda de tu bici, con las abrazaderas que vienen incluidas, y haz lo mismo con el sensor de velocidad en el buje trasero de tu bici. Ya te queda muy poco para disfrutar de todo.
Con la app de Spiny abierta, tendrás que entrar en la configuración y conectar los sensores. Cuando lo hayas hecho, sólo te esperan los kilómetros de felicidad sobre tu bici de siempre pero con esa magia que aporta una asistencia eléctrica.
En marcha
Las sensaciones son buenas desde la primera pedalada, la asistencia, al principio, puede resultar algo brusca, pero te acostumbras rápidamente y ofrece la ayuda que estabas esperando en tu bicicleta.
Los sensores de velocidad y de cadencia, conectados al motor y a tu app, son los encargados de cortar la asistencia cuando dejamos de pedalear o cuando alcanzamos los 25Km/h y cumplen su función a la perfección.
No notamos que la bici pese mucho más, esos dos kilos extra, justo en el tubo vertical, probablemente en el mejor sitio para añadir peso a nuestra bici, no se notan demasiado y menos cuando comienza a funcionar Spiny.
La ventaja del peso es entrar con nuestra recién estrenada bici electrificada en cualquier ascensor, subir cualquier escalera o, si quieres dejarla candada en la calle, extraer el Spiny en 5 segundos.
Conclusiones
Un kit de conversión eléctrica puede ser una solución fantástica para tener asistencia en tu bici de siempre sin necesidad de desembolsar una gran cantidad de dinero. Spiny es el más ligero del mercado, tiene una relación calidad/precio extraordinaria (499€ si lo compras online) y es muy, pero que muy sencillo de instalar.
Si se te ha pasado por la cabeza electrificar tu bicicleta de toda la vida, te recomendamos que tengas Spiny muy en cuenta.
Prueba del Kit de conversión eléctrico Spiny (499€)
Es suave, muy fácil de instalar, a un precio asequible, con un funcionamiento sencillo y una cuidada estética, a lo que hay que sumar que apenas pesa dos kilos, lo que le convierte en el más ligero del mercado. Es una buena opción si necesitas ponerle ayuda extra a tu bici de toda la vida sin tener que comprar una e-bike nueva. Tiene una autonomía suficiente para el día a día en un uso urbano normal y todo el software es actualizable vía app. Recomendable 100%.
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Estética
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Instalación
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Funcionamiento
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Acabados
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Presentación
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Relación calidad/precio