Nueva York es cada día más ciclista. Y el Ayuntamiento de la ciudad de los rascacielos parece haberse dado cuenta de ello. Según anunció ayer Trolly Tottenberg, Comisionada del Departamento de Transporte (DOT), los autobuses de la MTA contarán con portabicicletas en su parte delantera, una propuesta que ha sido recibida con entusiasmo por la comunidad ciclista de la Gran Manzana.
“Es una medida de sentido común que ayudará a que los residentes puedan movilizarse de muchas maneras por la ciudad”, declaró Paul Steely White, director ejecutivo de la organización Transportation Alternatives, una de las más activas de Nueva York.
“Es una medida de sentido común”, señala Paul Steely White, de Transportation Alternatives
Trottenberg también reafirmó el compromiso de la ciudad para ampliar la red de bicicletas con 80 kilómetros de carriles bici cada año, incluyendo 8 kilómetros de carriles protegidos. Y puso datos a la fiebre ciclista que invade la ciudad desde hace unos años: cada día se realizan en la ciudad más de 340.000 viajes en bicicleta, una cifra que el Ayuntamiento pretende duplicar de cara a 2020.
Los puentes, asignatura pendiente
La idea de instalar los nuevos portabicicletas ha surgido como parte de la campaña Bikes and Bridges (Bicicletas y Puentes), que pretende rehabilitar la infraestructura de los cruces de puentes para que puedan ser cómodamente atravesados por los ciclistas. De momento se van a estudiar los 15 cruces a lo largo del río Harlem que conducen al Bronx.