“Neeg es un microemprendimiento familiar”, cuenta Adrián Pienso, responsable de la marca y ciclista urbano convencido. “Surgió de mi propia experiencia: tener que lidiar, cada día, con el problema de no tener dónde estacionar la bicicleta”. Es cierto: rejas, bancos, farolas… ¿Dónde están? ¿Son seguras, son cómodas, son, en definitiva, un buen sitio para dejar a nuestra querida bici?
Pienso investigó, y no encontró ninguna solución al problema a su alrededor. Así que decidió pasar a la acción, y se pudo manos a la obra: diseñó y fabricó un sistema de aparcamiento de bicis que le sirviera a él y, por extensión, a cualquier ciclista urbano del mundo, y terminó creando Neeg.
La marca, nacida en Argentina, ya ofrece dos modelos de pared, uno de suelo y un rack de doble nivel
El prototipo salió a la luz a finales de 2013, y en agosto de 2014 sacaron al mercado dos modelos de soporte de pared, un aparcamiento de suelo y un rack de doble nivel. Según Pienso, “Todos diseños propios, diferentes de lo que se conoce, buscando que sean prácticos, de buena calidad y no dañen la bicicleta”.
Un mes después ganaron un concurso de emprendedores que les permitió estar en Expo Bici, la feria más importante de ciclismo en Argentina, donde la máquina se puso definitivamente en marcha: recibieron pedidos de todas las provincias del país, de Uruguay y de Chile. Tanto su web como, por supuesto, su página en Facebook muestran desde entonces bastante actividad.
“En sólo tres meses”, reconoce Pienso, “Neeg pasó de ser un entretenimiento para un par de horas al día a tener las puertas abiertas para un mercado impensado”. El resultado: toda una familia, o casi, dedicada a conseguir que cada vez más ciclistas urbanos puedan aparcar con tranquilidad, y seguridad, su bicicleta.