Las reglas son muy sencillas: equipos de dos participantes, un punto de salida común y al mismo tiempo y una carrera sin pausas ni interrupciones a lo largo de 1.000 kilómetros a través de la región de Karoo, una zona desértica entre Sudáfrica y Namibia. ¿Algo más? Sí: la carrera tiene lugar a principios de diciembre (en concreto entre el 3 y el 8), en pleno verano.
Cada pareja ha de pagar 10.000 dólares (casi 7.500 euros) para participar, sin ninguna exigencia previa. La comida y el alojamiento están incluidos, y hay un máximo de 450 equipos (900 corredores) participantes. La organización no facilita la ruta hasta pocos días antes del inicio de la carrera, puede usarse GPS propio y hay, a lo largo del trayecto, cinco puntos de avituallamiento donde comer y dormir, además de puestos con agua cada 50 ó 60 kilómetros.
La carrera comenzará en Bloemfontein, para terminar en una zona de viñedos cerca de Stellenbosch. La mayor parte del recorrido transcurrirá por caminos de tierra, y los organizadores intentarán “que sea un poquito más larga” que los 1000 kilómetros previstos. El ideólogo de la carrera, Alex Harris (deportista extremo y explorador) ha participado en algunas de las carreras de bici de montaña más duras del mundo, cruzado a pie el Polo Sur o subido el Everest. Harris es dueño de Xplore, una empresa que organiza viajes de aventura extrema.
Lugares incomparables y un enorme desafío tanto físico como psicológico… ¿Te apetece participar en la que, dicen, es la carrera ciclista más dura del mundo? “Ser duro no es un derecho ni un privilegio… Es una elección”. ¿La eliges tú?