Una vez cae el sol, las luces son obligatorias en la bicicleta. En el caso de la luz trasera, la práctica totalidad de modelos incluyen la posibilidad de que ésta sea intermitente, en lugar de fija. Ella confiere una mayor visibilidad para los conductores del resto de vehículos.
No todo el mundo lo ve así. Es el caso del policía que sancionó a un ciclista una multa de 200 euros… única y exclusivamente por protegerse. El problema es que la ley ampara al agente, en una de esas incongruencias legales incomprensibles.
“Mi nombre es Hilario y soy un ciclista habitual”, explica el impulsor de la petición. “Estoy muy preocupado por mi seguridad y por la de todos los ciclistas que salimos a montar en bici en España. Cada vez que cae la noche o que el día está un poco oscuro nos exponemos a sufrir un accidente, y el código de seguridad vial lo permite”.
“Cualquier conductor puede confundir la luz fija con la de una farola, el guardarrail o una casa cercana”
“Por norma, la luz que llevamos en la parte de atrás de la bicicleta es una luz fija. Cualquier conductor puede confundir esta luz fija con la luz de una farola, la del guardarrail o con la luz de una casa cercana”, cuenta Hilario. “Por eso, quiero pedir a la Dirección General de Tráfico (DGT) que permita a los ciclistas el uso de la luz parpadeante en la parte trasera de la bicicleta. Es por la seguridad de todos”. Y concluye: “Los conductores nos verán mucho mejor, los ciclistas estaremos más protegidos y no tendremos que pagar ninguna multa por buscar nuestra seguridad”
Desde Ciclosfera queremos animar a todos nuestros lectores a secundar la petición. Puedes hacerlo, con un sólo clic, en el siguiente enlace.