Los hechos ocurrieron en Santa María del Camino, un pequeño pueblo situado en el oeste de Mallorca (Islas Baleares). Fue allí donde dos turistas, que practicaban ciclismo en dos bicicletas de alta gama, se detuvieron en un restaurante para beber y comer algo.
Sin embargo, se despistaron un momento y la bicicleta “voló”: un par de individuos cogieron la bicicleta de uno de ellos y la metieron en una furgoneta. Por supuesto, salieron a toda velocidad en dirección a Palma de Mallorca, la capital de la isla.
Por suerte su huída no pudo completare. A los pocos kilómetros, en una carretera local, fueron localizados e interceptados por las autoridades, que recuperaron la bicicleta sin ningún desperfecto.
Según parece los dos individuos, que permanecen detenidos, tienen antecedentes delictivos por robos similares.