El sistema se basa en un pequeño sensor pegado a la llanta, que envía datos en tiempo real sobre la temperatura y la presión de las ruedas a nuestro móvil, en el que debemos introducir una aplicación de la marca.
Dicho y hecho: mientras rodamos, basta con consultar nuestro teléfono para conocer la temperatura y la presión de ambas ruedas, permitiéndonos circular así con mayor seguridad y control.
La intención de Lightweight sería incorporar esta innovación a sus juegos de ruedas como una opción.