Desplegada era tan grande como una bici normal, pero plegada podía guardarse en cualquier sitio. Hablamos de la FUBi, un proyecto finlandés que necesitaba 90.000 libras (unos 112.000 euros) para fabricarse en serie, pero que fracasó el pasado año en Kickstarter (recaudó poco más de la décima parte del dinero necesario).
Y eso que tenía atractivos. Desplegada podía rodearse a altas velocidades e incluso atreverse a un paseo por el campo. Tenía varias posibilidades de plegado, y la más reducida permitía guardar la bici, ruedas aparte, en una bolsa del tamaño de una raqueta de tenis. Los bujes eran finísimos, al igual que el volumen de las ruedas. Y, en general, era una bicicleta atractiva, deportiva y liviana.
Técnicamente, la FUBi tenía soluciones originales como toda la que forma el eje cambio/cadena, y viendo los vídeos el plegado no parece demasiado complicado. No eran necesarias herramientas extrañas para cambiar sus componentes, y su propia configuración simplificaba alguna de las tareas de mantenimiento. Al no tener partes móviles las ruedas podían cambiarse muy rápidamente, guardarse en cualquier sitio e incluso cambiar la configuración de la bicicleta, convirtiéndola en una montura más apta para vías campestres.