La popularización del ciclismo urbano ha traído consigo un aluvión de accesorios pensados para hacer la vida más fácil al usuario de bicicleta. No sólo eso: también ha posibilitado que sean cada más los fabricantes que procuran darle una vuelta creativa a sus productos para hacerlos más atractivos.
Este es el caso de Freemaster. Unas luces que cumplen perfectamente con su función de hacernos ganar visibilidad al pedalear por las calles y que, al mismo tiempo, dan un toque de personalidad y distinción a nuestra compañera de dos ruedas gracias a su llamativa forma de corazón.
Además de hacernos ganar visibilidad, las Freemaster dan personalidad a nuestra bicicleta
La luz trasera Freemaster cuenta con cinco modos de iluminación y una batería de iones de litio de 800 mAh, lo que garantiza un tiempo de funcionamiento de 6 horas después de una carga completa. Ésta se realiza cómodamente a través del puerto USB, por lo que se puede cargar con cargadores portátiles, PC o el propio cable USB.
La instalación de Freemaster es enormemente sencilla gracias al velcro. Y por si fuera poco es impermeable, por lo que se puede utilizar incluso en caso de lluvia intensa.
El paquete de Freemaster incluye una la luz trasera, un cable USB, un velcro y el pertinente manual de uso. Todo, por un precio imbatible: 9,99 euros.