A veces, cuando circulamos en bicicleta, girar la cabeza para tener constancia de lo que está ocurriendo detrás nuestro puede ser incómodo o incluso arriesgado. Es por ello que cada vez es más frecuente ver a ciclistas que utilizan un retrovisor para bicicletas incorporado en su manillar o cuadro.
Pero, ¿y si nuestro propio casco pudiera hacer la función de grabar lo que ocurre a nuestra espalda y enviar la señal a nuestro teléfono móvil acoplado al manillar? Esa es la idea que han tenido los responsables de Edge, un casco que es, además de un elemento de seguridad activo, un retrovisor para bicicletas en toda regla.
Edge cuenta, en la parte frontal y trasera, con dos cámaras Full HD capaces de grabar video a 30 fps. Sus lentes tienen un ángulo de 160º tanto por delante como por detrás, dejando un espacio muy breve de ángulo ciego. Como tiene capacidad de grabación, necesitarás dos tarjetas de memoria (una para cada lente) de unos 32 GB que ya vienen incorporadas en el casco.
La Edge cuenta con dos cámaras Full HD delante y detrás
El casco cuenta también con conexiones WiFi y Bluetooth para vincularlo al teléfono, desde el que se puede ver una imagen en tiempo real. Para alimentar todo el aparato necesita una batería que cuenta con una capacidad de 3.200 mAh y que se carga vía Micro-USB.
Por el momento, este singular casco y retrovisor para bicicletas es sólo un proyecto. La buena noticia es que puedes apoyarlo y hacerte con el tuyo a través de la plataforma de micromecenazgo Kickstarter. ¿El precio? 270 euros. Por el momento, sus responsables llevan recaudados algo más de 7.500 de la ambiciosa meta de casi 64.000 que se han propuesto.