El Commuter X4 consiguió la medalla de plata en el concurso de inventores británicos celebrado en el pasado Gadget Show Live, y superó una campaña de financiación en Kickstarter para hacer realidad su fabricación.
El sistema consiste en un proyector luminoso central, que se une al cuerpo del ciclista a través de cuatro bandas recorridas por fibra óptica.
Según sus creadores, el ojo humano mide la distancia a través de dos o más puntos focales. Además, el Commuter X4 crea un efecto luminoso único, que nos distingue claramente del resto de vehículos de la calzada.
El sistema de anclaje no sólo rodea al ciclista, sino también a su mochila
El sistema de anclaje permite adaptar la luz a cualquier ciclista, y es muy visible desde todas las direcciones. Además, es resistente al agua y puede rodear a mochilas de hasta más de 35 litros de capacidad: es más, a través de un clip puede asirse a nuestra bolsa de todos los días para no estar montándolo y desmontándolo a diario.
Lo que más llama la atención del Commuter X4 es, sin duda, su luminosidad. Las bandas de fibra óptica ejercen también como reflectores, la luz central acapara la atención de los conductores y el conjunto es imposible de obviar por la noche.
El sistema se carga por un puerto USB, y es capaz de aguantar entre 4 y 15 horas según el modo elegido. Puede elegirse distinta frecuencia de destello, y todas las luces (incluida la central) son LED, recubiertas por una lente que, además de ejercer de difusor, evita deslumbrar a los otros usuarios de la vía.
Pese a su tamaño, el Commuter X4 sólo pesa 225 gramos. El precio del dispositivo es, sin incluir gastos de envío, 49,99 Libras, unos 63 euros.