Todo lo que necesita el ciclista para reparar o poner su bicicleta a punto en una pequeña y sofisticada funda de cuero adaptable al cuadro. Su diseño recuerda a las clásicas carteras portaherramientas, pero a diferencia de éstas, su contenido es mucho más completo.
Y es que este pequeño estuche de cuero (disponible en marrón o en negro) utiliza la estructura del desmontable como destornillador, tronchacadenas y abrebotellas. Además, claro está, de incluir diferentes puntas hexagonales según las necesidades del ciclista.
Mark Windsor es el responsable de Full Windsor, la pequeña empresa de accesorios ciclistas con sede en Londres que ha lanzado este ingenioso sistema, un producto que ya ha superado con éxito el presupuesto inicial en la campaña de micromecenazgo Kickstarter.
Además de este estuche portaherramientas, cuyo modelo simple cuesta 65 dólares (unos 50 euros aproximadamente), Full Windsor ofrece la posibilidad de obtener una gorra personalizada, una camiseta ciclista o grabar tu nombre en la funda.