Los que usamos habitualmente la bicicleta lo sabemos bien: hay pocas cosas más parecidas a volar. Una sensación de libertad e independencia inigualable. Algo parecido, quizás, a lo que sentiríamos si tuviéramos la gracilidad de un pájaro.
El arquitecto californiano John Aldridge se inspiró precisamente en esa sensación para dar forma a una bicicleta sorprendente, a la que ha bautizado Bird of Prey. Para su diseño, Aldridge quiso dar una vuelta de tuerca a la postura de conducción del ciclista, consiguiendo que éste se colocara tumbado sobre la bicicleta.
Según su creador, Bird of Prey logra una aerodinámica inédita hasta la fecha, gracias a que el centro de gravedad se sitúa más bajo de lo normal y el esfuerzo del pedaleo encuentra mucha menos resistencia en el viento, lo que la convierte en una de las bicicletas más veloces jamás creadas. Además, Aldridge asegura que es más segura que una bicicleta convencional, y que con ella se eliminan los dolores de espalda que a menudo sufren muchos ciclistas.
Bird of Prey ha sido construida a mano por el artesano Russ Denny. Tal circunstancia lleva, inexorablemente, a que su precio sea muy elevado: nada menos que 8.500 dólares (algo más de 7.500 euros). Para encargar una de estas bicicletas, basta con escribir directamente al propio Aldridge al correo electrónico birdofpreybicycle@gmail.com.
Puede que Bird of Prey pase sin pena ni gloria por la dilatada historia de las bicicletas. O puede que, algún día, esta innovadora forma de pedalear se convierta en habitual y las calles y carreteras estén plagadas de monturas como la ideada por Aldridge. ¿Tú qué crees?