Según cuentan en el canal de televisión estadounidense NBC Channel 7 News, por fuera es igual que cualquier otro autobús. Los cambios llegan en el interior: en lugar de los habituales asientos encontramos nueve bicicletas estáticas, toallas “e incluso fruta a mano” para los esforzados viajeros.
La idea fue de Seema y Eric Brodie, dos abogados que buscaban nuevos rumbos profesionales. Le dieron muchas vueltas y, según cuenta la propia Seema a 7 News, “vimos cómo podíamos mezclar un gimnasio, algo móvil y que además se pudiera usar durante la hora punta de tráfico”.
El vehículo hace rutas de 45 minutos, y de momento sólo se usa para eventos empresariales, pero quizá sólo sea el principio. El objetivo es crear líneas regulares, que permitan a la gente ir a trabajar y, en lugar de ir sentados en su coche o en un autobús normal, combatir el sedentarismo y, por supuesto, hacer de cada trayecto una experiencia divertida.
En la web de BikeBus encontramos todavía más información: las bicicletas son Schwinn “aseguradas al suelo”, que incluyen pantallas con información sobre el rendimiento obtenido. El interior del autobús equipa un sistema “purificador de aire”,