Ahora que cumple diez años, ¿cómo ves el RHC?
Alucino con su tamaño. Hemos trabajado mucho para conseguirlo, pero cuando ves las reacciones que genera, la cantidad de público y su relevancia en redes sociales te das cuenta de lo importante que es y de cuánta gente formamos parte de él.
Como director creativo… ¿Cómo defines el estilo de la carrera y, por extensión, de su público?
No tiene nada que ver con lo que muchos entienden por una prueba ciclista. Evidentemente no es como ir a una exposición, pero muchos de los que acuden están muy interesados en el arte y la cultura. Además, creo que es un espectáculo muy fácil de comprender, seguir y disfrutar, además de apto para todos los públicos.
Como diseñador de los carteles o maillots de la carrera… ¿En qué te inspiras?
En la obra de, por ejemplo, fotógrafos como Man Ray y cómo en la década de 1920 y 30 se adelantó a su tiempo. También, a nivel cartelería, me interesan los procesos políticos en lugares como Sudamérica, y cómo generaron un determinado estilo artístico y revolucionario a la vez. Al mismo tiempo, cada año pensamos en un tema concreto, en algo que esté pasando en la actualidad y queramos explorar, aunque siempre sin perder de vista la propia historia y el pasado de nuestra carrera.
“La bicicleta es un vínculo, un nexo de unión, y eso provoca que compartamos pasiones y preocupaciones”
¿Qué conexión encuentras entre la cultura pop y el ciclismo urbano?
Creo que, además de su amor por la bicicleta, todos los ciclistas urbanos tenemos valores parecidos. No importa de dónde procedas: la bicicleta es un vínculo, un nexo de unión, y eso provoca que compartamos pasiones y preocupaciones.
¿Cómo definirías una carrera del RHC?
Como algo excitante y espectacular. También como una fiesta, donde la gente pasa un rato muy divertido, experimenta cosas nuevas y puede interacturar con otros. Nunca hemos querido crear una carrera para un solo tipo de público, sino algo que pueda apasionar a todo el mundo.
¿Cómo es Trimble? ¿Cómo es trabajar con él?
Es un genio, el alma de RHC y la razón por la que ahora la carrera es lo que es. Ha llevado la prueba a un nivel de exigencia extremo, porque él es así y todos los que trabajamos aquí también debemos serlo. Al mismo tiempo, es muy inspirador trabajar con él y ver cómo, aunque siempre se implica mucho en cada proceso de trabajo, es también capaz de darte toda la libertad que necesites.
En tu caso, además, siempre has sido muy aficionado a la bici.
Mi padre siempre estaba encima de una bicicleta, y me contagió su pasión. De adolescente trabajé de mensajero y he pasado mucho tiempo de mi vida entre bicis. Ahora vivo en Los Angeles y monto algo mucho meso, pero sigue siendo maravilloso formar parte de todo esto, de algo tan impactante como el ciclismo urbano. Es un movimiento mundial que está influenciando a la cultura global, y que a los jóvenes les resulta cada vez más atractivo. Sobre una bicicleta la gente se siente más feliz, divertida y poderosa. Es fascinante.