Apple

Apple Watch: ¿interesante para ciclistas?

Apple ha presentado su último producto, un reloj llamado Watch. Un complemento que, según la marca, puede ayudarnos a llevar una forma de vida eficiente, dinámica y saludable… ¿Será útil para los ciclistas urbanos?

Costará unos 300€ (en EE UU sale a un precio de 349$), para usarlo es necesario ser también dueño de un iPhone (hay mucho que sincronizar) y su estética no es tan revolucionaria como muchos esperaban, pero es indudable que es una de las noticias tecnológicas del año. El Watch de Apple ya ha salido a la luz y, seguro, más de un ciclista estará interesado en ver qué características tiene…

El Watch es un reloj de pulsera con tres versiones: la básica (con caja de acero inoxidable en plata o negro, cristal de zafiro y distintas correas), la Sport (caja de aluminio anodizado en plata o gris, pantalla de vidrio reforzado, correas más coloridas y algo más ligero que las otras versiones) y la Edition (caja de oro de 18 quilates y cristal de zafiro).

watch01
watch01

No importa la versión: todas ellas pretenden servir, entre otras muchas cosas, para facilitar información y ayudar al usuario a mantenerse activo. Así, por ejemplo, el sistema incluye una aplicación llamada Actividad que muestra tres anillos que nos muestran el tiempo que pasamos estáticos, moviéndonos o, directamente, haciendo ejercicio, calculando calorías y hasta las veces que nos ponemos de pie. Otra aplicación, Entrenamiento, mide nuestra frecuencia cardiaca, registra nuestros logros y nos anima a incrementarlos.

En principio, Watch nos ayudaría a orientarnos, calcular distancias y esfuerzos y saber, de un simple vistazo, quién nos llama o escribe

Por supuesto, el reloj incluye la posibilidad de enviar o recibir correos electrónicos, llamadas o mensajes tipo WhatsApp (además de otras formas comunicacionales creadas por Apple para el reloj). Pero, centrándonos en sus utilidades para un ciclista, el Watch cuenta con un acelerómetro que mide nuestros movimientos corporales, junto a un sensor de frecuencia cardiaca que calcula la intensidad del ejercicio y la posibilidad de, a través del GPS y el Wi-Fi del iPhone, medir las distancias recorridas.

Y no es, por supuesto, sólo una cuestión de entrenamiento: el Watch también cuenta con un mapa que nos ayuda a guiarnos mientras pedaleamos por la ciudad, un reproductor de música que nos ameniza el camino o un controlador para hacer fotos y vídeos con el iPhone que, por ejemplo, llevemos colgado de alguna parte de nuestra bicicleta.

Esto es sólo el principio. Porque no pasará mucho tiempo hasta que aplicaciones ya existentes, como Strava, MapMyRide o Wahoo saquen nuevas versiones especialmente adaptadas para usar con el Watch de Apple. De momento, habrá que esperar: las primeras unidades del Watch no llegarán a España hasta 2015.