Son las cinco de la tarde en la plaza del Ayuntamiento de Valencia. Amadu Suma posa ante las cámaras con cara de felicidad, agradecimiento y sorpresa. Acaba de recibir un premio por ser el usuario de Valenbisi, el servicio de alquiler de bicicletas de Valencia, que más kilómetros recorrió durante un año: 6.000 de septiembre de 2015 a septiembre de 2016.
“No me esperaba este premio”, reconoce Amadu. “Me llamó una amiga para decirme que me había tocado, y pensé que se trataba de un sorteo”. La recompensa es simbólica, pero valiosa: un bono para disfrutar de Valenbisi otro año más y seguir haciendo más y más kilómetros.
El largo viaje
“¿Que a dónde voy en bici? ¡A todas partes, no tengo otro medio de transporte!” cuenta Amadu. “Voy a la mezquita cinco veces al día, con lo que ya son diez viajes. Y durante seis meses he estado haciendo talleres de formación de lunes a viernes, a los que también iba pedaleando”.
“¿Que a dónde voy en bici? ¡A todas partes!”
Amadu, de 24 años, llegó a Valencia en 2013. Fue la última parada de una odisea que arrancó en su país, Guinea-Conakry. “Crucé ilegalmente de Marruecos a Melilla, donde permanecí durante tres meses en un CETI (Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes). Desde ahí una ONG me llevó en barco a Málaga, después a Cádiz y más tarde a Madrid, desde donde viajé a Valencia”, recuerda. No fue fácil. Durante ese tiempo falleció su madre, y temió por su vida en varias ocasiones.
Su sueño, y mientras consigue un permiso de trabajo, es convertirse en futbolista profesional, una actividad que compaginaba en su país con trabajos esporádicos de todo tipo. Sabe que triunfar en el fútbol es difícil, pero no se rinde y se prepara a conciencia. “Esta temporada aún no he podido jugar, ya que tengo una lesión de rodilla, pero dentro de poco volveré al equipo de Primera Regional donde jugaba”, explica con ilusión. Su objetivo es reunir el dinero suficiente para volver a su país “a saludar a mi familia”.
Por el momento, los responsables de Valenbisi tienen en él a uno de sus mejores embajadores: “Me encanta Valenbisi”, asegura, “es un transporte muy barato y no da problemas. Rara vez me muevo de otra forma”. Amadu, que probó el sistema tras sufrir el robo de dos bicicletas, tiene claro que no piensa volver a comprar una, al menos mientras siga pudiendo rodar en bicicleta pública.
Para todos
El 9,2% de los valencianos se mueven en bicicleta, lo que la sitúa como la segunda ciudad de España con mayor número de ciclistas urbanos. Un porcentaje esperanzador en el que ha jugado un papel esencial Valenbisi, puesto en marcha en junio de 2010. Operado por JCDecaux (encargada también de las bicicletas compartidas de Sevilla, Córdoba, Gijón y Santander), Valenbisi cuenta con 2.750 bicicletas distribuidas en 275 estaciones. El usuario paga una cuota anual de 29,21 euros que le permite usar las bicicletas de forma gratuita durante la primera media hora.
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