Ya, ya, claro, lo ideal sería tener una bicicleta de carga de las que tantas veces te hemos hablado en Ciclosfera, pero lo cierto es que, mientras te terminas de convencer para comprarte una y va a haber decenas de ella en Ciclosferia, vamos a ver cómo podemos equipar tu bici de siempre para que pueda resultarte cómodo y seguro ir a la compra en bicicleta.
"Ahora lo tengo más dominado, pero al principio parecía Mr. Bean" (Laura, ciclista urbana)
Hemos tenido la ocasión de hablar con Laura (no quiere decir nada más que su nombre). Llevaba tiempo pensando en que podría dejar el coche en casa y acercarse al supermercado a por la compra con su bicicleta, así que se lanzó a hacerlo hace ya más de un año: "Ahora lo tengo más dominado, pero al principio parecía Mr. Bean, se me caían las cosas, la bicicleta me iba haciendo eses, hasta que comprendí que, o equipaba mi bici con lo necesario, o tenía que volver a coger el coche. Al final, por el precio de un depósito de mi coche, me hice con todo lo necesario para ir a la compra en bici. Lo mejor de todo es que desde que lo hago, he visto cómo otros vecinos se han animado también. Creo que soy una influencer de barrio".
Antes de empezar con todo lo que necesitas, los más y los menos de cada opción, conviene resaltar que ir a la compra en bici supone comprar menos cada vez, pero con más frecuencia, favorece la economía de cercanía y nos hace un pelín más felices. Se nota desde el primer día. Dicho esto, hazte con un buen candado, y vamos al lío:
Nada de bolsas colgando del manillar
Antes de nada, por lo que más quieras, no cuelgues las bolsas sin más del manillar. Cuando llevas bolsas con peso colgando de alguno de los lados del manillar, va a hacerte llevar una trayectoria con muchas eses y puede resultar peligroso. Estás añadiendo mucho más peso a un lado y vas a tener que pedalear torcido. Este consejo vale para ir a la compra o para todo lo que te de la gana: no cuelgues nada del manillar que no sea específico de manillar, valga la redundancia. Nos explicamos: Hay maletas / bolsas de todo tamaño para el manillar y son específicas para eso. Van ancladas al centro, donde está la potencia de la bicicleta, para conseguir que el peso recaiga sobre el centro y no te suponga un riesgo.
Además… ya no es sólo por tu seguridad, si compras cualquier cosa y la llevas mal colgada del manillar, lo más probable es que acabe en el suelo y echada a perder toda tu compra. No sería la primera vez que vemos a alguien corriendo tras unas cuantas manzanas cuesta abajo. Puedes también instalar una cesta en el manillar, el efecto es el mismo y le da un toque bastante más cool.
Alforjas
Hay de todos los precios y de todos los tamaños. Es la opción que más recomendamos. Pero para llevar alforjas, tu bici debería tener un "portabultos" o transportín. Si no lo tiene, es lo primero que deberías comprar. También son bastante asequibles para lo útiles y versátiles que son. Convierten tu bicicleta en una poderosa máquina de transportar cosas.
Acércate a una tienda especializada para que te aconseje, según el tipo de bici que tengas, cuál es el portabultos que mejor se adapta a ti. Una vez cumplido ese paso, ya estamos listos para colgar unas alforjas.
Por cierto, verás que hay alforjas que se venden por separado, es decir, sólo una. No te preocupes que no se desestabiliza tu bici, ni te vas a caer hacia un lado. El centro de gravedad queda tan cerca del suelo que vas a poder montar en bici con total normalidad aunque sólo lleves una alforja. Consejo extra: pon la alforja del lado de la pata de cabra, así, al parar, la bici no se caerá del otro lado. Espera ¿no tienes pata de cabra en tu bici? Pues viene estupendamente, pero también para esto hay opiniones. Puede ser un gran debate: pata de cabra sí o no, a favor o en contra, defensores o detractores…
Remolques
[Los remolques para bicicleta(/remolques) son muy útiles, fantásticos para ir a la compra y hasta para hacer una mudanza, pero vas a tener que buscar un hueco en casa para guardarlos, aunque, ciertamente, la mayoría de ellos se pliegan bastante y no son muy complicados de guardar. Los remolques utilizan una pieza metálica que has de instalar en la rueda o vaina trasera (depende del modelo) de tu bicicleta. Breve consejo sobre los remolques: a mayor precio, mayor calidad. No hay casi engaños en este aspecto en el mundo del ciclismo, afortunadamente: cuando algo es caro, suele ser de buena calidad.
Verás que hay cientos de modelos, con acoples para niños o mascotas, antes de lanzarte comprar el que más te guste, pregúntate una y mil veces qué es lo que vas a hacer con él (¿llevar la compra, dos niños, un piano, un mastín?) y después, déjate asesorar por las tiendas o los fabricantes. A nosotros, personalmente nos gustan mucho los Croozer y los Burley.
La sillita del niño
Lo sabemos. El peque ya ha crecido y tienes en el trastero una sillita para llevarlo en bici muerta de risa. Pues puede ser una opción. Si nadie te ha hecho oferta alguna por ella en las webs de segunda mano, vuelva a instalarla en tu bici y tira para el mercado. Sobre esa sillita podrás poner una bolsa grande de la compra y además atarla con el cinturón en el que antaño atabas al bebé.
Ojo: los portabebés no son un accesorio para llevar la compra, que conste, es una alternativa temporal, transitoria y más o menos digna para que vayas cómodo y seguro a comprar con tu bici hasta que te compres unas alforjas como debe ser.
Mochilas, a tu elección
Parece lógico. ¿Para qué me voy a comprar una alforja si tengo en casa mochilas de todo tipo? Llevar mucho peso en la espalda, aunque sea un trayecto corto, igual no es la mejor manera de pedalear, por no hablar del sudor en la espalda, pero para gustos, los colores, así que, a tu elección, pero nuestro consejo es que te hagas con unas alforjas y verás cómo, al final, no las usas sólo para ir a la compra, sino que las empezarás a cargar con todo. Acabarás moviéndote en bici para cualquier recado.