La barba está de moda entre los ciclistas urbanos. El afeitarse las piernas, de momento, no, aunque siempre se ha llevado en el ciclismo en carretera. Los motivos para pasarse una cuchilla por las extremidades inferiores eran varios, pero parece que en el fondo puede ser uno: se va más rápido.
Eso al menos asegura un estudio de Specialized difundido por la web Bikeradar: llevar las piernas rasuradas aporta una ventaja aerodinámica muy leve, pero real… Un minuto y diez segundos de media en una distancia de 40 kilómetros.
Mark Cote y Chris Yo, expertos de la marca en el túnel del viento, subieron a un ciclista en una montura Specialized y le sometieron al experimento, con los resultados antes mencionados.
La marca hizo un experimento muy similar (en este caso, con un vídeo presentado sólo por Yo) para dirimir si también la barba podía tener también algún tipo de influencia en el rendimiento al pedalear.
En este caso, y también sobre una distancia de 40 kilómetros, la diferencia fue mínima: un segundo a favor de la cara afeitada.